Muchísima suerte muad!!!
Y recuerda que para liberar tensión en los monólogos, no hay nada mejor que hacer cómplice al público; que se rían de sí mismos, y con eso te les ganas seguro. Antes de empezar el monólogo, comienza con un chascarrillo vacilón estilo:
Segun sales a escena, recorres el patio de butacas (es decir, las 4 mesas) con la vista, y poco a poco empiezas a sonreir. Luego vas subiendo el nivel, de sonrisa a risa, a carcajada, a partirte el culo... Sin que la gente sepa por que.
Luego haces como que se te pasa un poco y lo explicas: "Perdon, pero es que estaba siguiendo el consejo de "si te pones nervioso, imaginate desnudo al público"... Y claro, visto lo visto... uno entiende los índices de natalidad en este país... y estoy dispuesto a poner remedio a eso con la rubia de la segunda fila."
Cuando la susodicha rubia esté roja como un tomate y el resto se partan, el público es tuyo. Y si durante el monólogo te quedas en blanco, mientras tratas de recordar, vuelve a mirar a la rubia fijamente y suelta algo gracioso, así distraes la atención y la gente se seguirá riendo mientras tanto