Andaba yo tan tranquilo, hace un rato, leyendo un cómic de los Xmen, con mis pantuflas, mi cómodo chándal, mi roñoso peinado de "rodríguez"... Hasta que tuvo que pasar, un descubrimiento brutal, increíble, revelador, que ha cambiado mi mundo de arriba a abajo y ha trastocato mis esquemas de la vida.
¿Queréis saber de qué hablo...?
Yo estaba, como digo, tocándome los cataplines como cada día, cuando de pronto oigo una estruendosa música, y pienso "Joder, ya está la cuarentona del B otra vez...". Pero no, se me ocurre asomarme a la ventana, y veo, en el edificio de enfrente, a una joven mochacha de buen ver ( y mejor tocar ), morena, recién salida de la ducha, todavía con la toalla envolviendo su tierno cuerpo... Aaaaaaaaahhhh...
Yo que me quedo alucinado, porque hace 12 años que vivo en mi actual domicilio y no tenía ni idea de que ahí viviera esa tía, sólo había visto en otro piso del edificio de enfrente a un jebi de 16 años, pero nada más.
Total, que mientras contemplo semejante visión, me doy cuenta de que si me pilla mirándola puede esconderse de mis lascivas miradas, así que opto por continuar mi espionaje de forma más discreta: Utilizo el viejo truco del espejo de mano, para que quede más claro pongo un dibujo:
Me voy al cuarto de mi hermano, que ya tenía la persiana un poco más baja que la de mi cuarto, y yo no quería llamar la atención haciendo ruidos, y encima estaba más cerca de la ventana esa de los vecinos.
Total, que allí miro y remiro usando el espejito, el cual a pesar de su baja calidad me proporciona un rato de inmenso
disfrute
, pero al rato me aburro de esconderme, y decido volver a la carga. Pienso "¡Qué demonios!" y me vuelvo a asomar de la ventana de mi cuarto, descaradamente. Pero debían de estar dando una fiesta, porque veo que la chica no es la única que está en la casa, y cómo el típico mono ( seguramente su novio
) se acerca a ella y comienzan a... a... ( hay niños leyendo esto? ) ...pues a besarsen y eso, ufffff, yo que creo que me han visto, porque el tío ese se pone a mirar por la ventana. Me vuelvo a ir, luego me voy asomando de otras ventana a ver si consigo ver de nuevo a la chica ésta... Sí, ahora sí, la vuelvo a ver, se ha vestido con un vestidito rojo, mmmmhje je je, y se exhibe por la ventana, yo ya que me empiezo a poner en situación...
Bueno, todavía están ahí, ya no me asomo tanto porque creo que me han pillado, pero ha merecido la pena. Mañana miraré de nuevo...