¿Os imaginais algo parecido a lo del vídeo hoy día? En menos tres minutos tienes ahí a los maderos repartiendo ostias y luego unas multas a casa de mil pares de cojones, tertulistos a sueldo indignados en radios y televisiones clamando contra los escraches y la violencia que suponen, sesudos analistas repudiando la turbación de la paz social y llorando con la presión que sufren los pobres políticos.
Anda que no ha cambiado el mundo en estos años. A veces infinitamente a peor.