El sargento, el soldado herido y una buena razónpara vivir
Os contaré una historia, puede parecer fantástica, pero me encuentro reflejado en dicha historia.
En la típica batalla de turno del futuro con blasters, lasers, etc...
Un soldado de un pelotón es herido de gravedad, el médico de campaña hace lo que puede pero el soldado está muy grave, pero asombrosamente el soldado
aguanta mas o menos estables sus constantes vitales y está consciente. Al cabo de un rato ven que se les acerca a su posición un pelotón enemigo y
necesitan todos dar lo mejor de si mismos, saben que tienen las de perder, pero no se amedrentan por nada del mundo, Y el soldado que hirieron de
gravedad coge su arma de nuevo y la empuña, el resto del pelotón le pregunta ¿pero qué haces? , estás herido descansa y ponte detrás de aquellas rocas.
El soldado herido se niega, mientras discutían sobre si se iba a quedar o no descansando el pelotón enemigo los asalta, después de un pequeño tiroteo de
15 minutos consiguen acabar con los enemigos, y asombrosamente el soldado que estaba herido grave, a pesar de estar débil seguía empuñando su arma. El
sargento del pelotón se le acercó y lo miró, no dijo nada.
A mitad de camino sus compañeros advierten que el soldado herido pierde gran cantidad de sangre y que sería bueno hacerle unas transfusiones, pero no son
ilimitadas, el soldado pierde mucha sangre y solo unos pocos compañeros le pueden donar una pequeña cantidad de sangre, pueden donarle cada uno 1 litro
de sangre, litro y medio a lo sumo y dichos soldados donantes ya tendrían problemas de mareos y poco aguante físico.
Al cabo de unas horas llegan a la nave nodriza de vuelta, el médico, asombrado les dice a los otros médicos, - es increible, ha aguantado mas de 4 horas
con esta herida, ¡¡¡una persona normal habría aguantado como mucho 10 minutos !!!!.
Uno de los médicos se le acerca, les pide al resto de personas que salgan de la sala y el médico al oido le pregunta al soldado herido.
¿Qué es lo que te importa tanto como para haber luchado contra la muerte de esa manera?
El soldado no dijo nada, pero miró hacia su mano izquierda que tenía el puño apretado y en él algo dentro, solo se podía ver por fuera una pequeña
cadena.
El médico comprendió inmediatamente de qué se trataba, le inyectó unos calmantes para el dolor y le dejó descansar.
En cuanto salió de la sala el resto de médicos y de compañeros de pelotón le preguntaron que por qué había aguantado tanto.
EL médico les dijo - Él tenía una muy buena razón para aguantar, yo en su misma situación hubiera aguantado lo que hubiera hecho falta-
Los soldados se quedaron extrañados, pero el sargento entendió lo que quiso decir, se dirigió a sus soldados y les dijo -Él tiene una gran vida por
delante.
Ahora ya ni recuerdo en qué libro la leí, pero sí, era de los pocos libros que he leído.
El caso es que yo estoy en dicha situación.
Mientras que el soldado herido aguantaba el mas tremendo de los dolores y se taponaba la herida pensando en esa gran razón por la que vivir, yo estoy
pensando en tirar la toalla, en dejar que me desangre, en definitiva, en no querer llegar a la nave nodriza.
La diferencia es que el soldado lo consiguió, pero yo no estoy tan seguro de conseguirlo, yo ahora mismo me encuentro a mitad de camino, dicho soldado no
sabía lo que iba a tardar en llegar a la nave nodriza y yo no voy a saber tampoco lo que voy a tardar en llegar a mi nave, me asaltan las dudas,
¿merecerá la pena sufrir y aguantar hasta llegar a la nave?, ¿o por el contrario haga lo que haga me voy a desangrar por el camino?, si me voy a
desangrar por el camino y no voy a llegar a la nave nodriza ¿por qué aguantar? ¿no es mas fácil morir lo antes posible ? ¿para qué alargar la agonía?.
En mi caso la herida del soldado es un símil con algo que me ocurre, dejando de lado si me va "bien" o "mal" mis estudios/trabajo/vida social yo también
estoy herido, y a decir verdad de muerte, mi cabeza no está bien y mi cuerpo tampoco, me cuesta mantener la cordura en momentos de máxima tensión, he
llegado un momento en el que la medicación para la cabeza para nada ayuda, mi médico ya me lo advirtió, "hay que pasar a cosas mas fuertes". Y bueno, hay
también otra cosa que me ocurre que tú no sabes, la verdad es que solo la sabe mi médico y mi hombre de confianza (mi sargento), y si no te lo he contado
es por no hacerte daño, bastante sufrimiento tengo yo y bastantes puertas me cierra como para contártelo, no quiero que sufras por mí, por que te
sentirás mal, yo me sentiré mal y nadie ganará nada así, mi sargento una vez en una de las batallas mas feroces en las que estuvimos me ayudó bastante a
llevar mi problema, acabábamos de ganar una gran batalla y se me ocurrió beber para celebrarlo con mis colegas del pelotón, en aquel sitio destilaban una
bebida deliciosa pero cuando mi sargento me vió solo bastó su mirada para saber lo que me estaba intentando decir, yo en ese momento tiré la botella y me
fuí a por un refresco de zurlog, sabe algo así como al zumo de piña.
Ahora ya no estoy en en ese pelotón, ya estoy apartado de las filas, pero..... Todo esto es lo que me está dando vueltas a la cabeza, no se qué hacer,
estoy sufriendo demasiado físicamente, no creo que merezca la pena seguir adelante, el único apoyo que me quedaba se tambalea, a decir verdad digo que se
tambalea por que no estoy seguro de si se ha caído ya ese apoyo o no, la verdad es que tengo muchísimo miedo.
En este momento el médico me está dando la última unidad de sangre disponible, la del cabo Ziper, pero todos están ya bastante serios, casi me dan por
muerto, pero.... aquel soldado que consiguó llegar a la nave nodriza....... ¿qué razón tenía para aguantar de esa manera?
Le envidio, yo no se qué hacer, de hecho creo que no puedo hacer nada, en estos momentos me miro al costado y aunque aprieto con todas mis fuerzas estoy
notando que sale mas sangre que antes, el médico se ha percatado de ello y va a usar el único hemostático que le queda, me ha dicho que notaré frío, pero
que con esto sangraré algo menos. Y que ahora todas las ayudas se han acabado, no hay mas unidades de sangre, no hay mas hemostáticos, me anuda su
chaqueta en mi costado para hacer presión, me duele, ¡¡¡¡ Sargento me duele, me duele mucho !!!!
No se qué hago pensando en todo esto, debería de concentrarme y en aguantar hasta llegar a la nave, pero mi sargento, ¿queda mucho todavía?, no puedo mas
en serio.
Necesito una buena razón sargento, démela por favor.