Hay veces que me paro a pensar, observo sin mirar nada y veo cosas que no están delante mío, simplemente veo aquello que mi imaginación quiere que vea. A veces me juega malas pasadas, otras sin embargo me deleita con la visión de algo o alguien a quien realmente quiero ver…
Ayer fue uno de esos días, perdí la vista en horizonte y allí apareció la silueta de una joven, hermosa como pocas y con un toque de inocencia que la hacía aún, si cabe, mas seductora, intentaba llegar a ella sin lograrlo, quedaba lejos de mi alcance demostrando que sólo era la ilusión de poder alcanzar algún día un sueño imposible. De pronto ella se giró hacia mí, su silueta flotó en el aire hasta llegar a mi lado, pronunció mi nombre de la manera mas sensual que nadie lo ha hecho jamás y con un simple gesto acarició mi rostro haciendo que abandonara mi cuerpo y la siguiese allá donde fuese que me llevaba… no me importaba, sentía que estaba seguro pasara lo que pasase… La seguí en silencio, simplemente observaba sus formas, su rostro, el baile de su cuerpo abriéndose paso entre una estela de colores que denotaba que no estábamos en ningún lugar conocido. Por fin se paró, se dio la vuelta y soltó mi mano dejándome caer suavemente, reposé mi espalda sobre aquella superficie mullida y la observé. Bajó mirándome a los ojos y sentí como dentro de los suyos había mas vida de la que jamás nadie haya conocido. Nos entrelazamos en un beso que pareció eterno y durante horas compartimos miles de segundos que hubiese querido eternos. Deseaba que el tiempo parase, que nunca despertase de aquello. De pronto ella se separó me miró a los ojos y me susurró su nombre, perdi la conciencia por el sonido dulce de sus labios y en mi cabeza quedó grabado su susurro….
Volví a mi cuerpo, notaba el peso de quien ha llegado a lo mas alto y ha caido de golpe, me faltaba algo, noté que con ella se había marchado parte de mí y desee con toda mi alma volver a sentir aquello, volver a ver su figura en horizonte pronunciando mi nombre de aquella manera… me aferré con todas mis fuerzas a su recuerdo y sólo pude caer mientras el eco de mi memoria recordaba su nombre… Patricia…
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