La
resurrección del Motorola Razr no fue todo lo rodada que le hubiera gustado a la filial de Lenovo. A pesar de la fanfarria inicial, sus pobres prestaciones, mediocres cámaras y problemas de durabilidad (que parecen extendidos en la primera generación de teléfonos plegables) ensombrecieron el relanzamiento de uno de sus modelos más icónicos. Ahora la firma presenta su revisión, que llega dispuesta a enmendar los errores del pasado.
Menos de un año después del lanzamiento del primer modelo, el nuevo
Razr 5G se presenta con un diseño relativamente parecido al del modelo al que sustituye, haciendo gala de una pantalla plegable de 6,2 pulgadas que una vez cerrada permite guardar el teléfono cómodamente en el bolsillo. En la parte exterior se presenta de nuevo un panel OLED Quick View de 2,7 pulgadas para mostrar notificaciones y accesos directos.
- Pantalla principal OLED de 6,2 pulgadas 2142 x 876 21:9
- Pantalla secundaria de OLED 2,7 pulgadas 600 x 800 4:3
- Snapdragon 765G
- 8 GB de RAM LPDDR4X
- 256 GB de almacenamiento
- Cámara trasera de 48 MP con enfoque láser y estabilización
- Cámara delantera de 20 MP
- Lector de huellas dactilares y NFC
- USB-C (sin conector de 3,5 mm, se incluyen auriculares Type-C)
- Batería de 2.800 mAh con carga rápida 15 W
- 72,6 x 168,6 x 7,90 mm (abierto), 190 gramos
Las novedades más importantes comienzan en el procesador, que ahora es un Snapdragon 765G. Sin ser un móvil de prestaciones gaming, el uso de este chipset potenciado especialmente para juegos sitúa al Razr 5G sensiblemente por delante de su predecesor, que estaba equipado con un ya muy añejo Snapdragon 710. También sube la RAM, ahora de 8 GB en lugar de 6 GB, y aparece un módem 5G que sirve de apellido al teléfono.
Las cámaras también han sido objeto de una fuerte revisión. La calidad de las originales eran incomprensibles para el precio del teléfono, así que Motorola las ha sustituido por un nuevo sensor exterior de 48 MP con asistencia láser, estabilización óptica y tecnología ToF para mejorar el enfoque, mientras que la cámara interna posee ahora un sensor de 20 megapíxeles, reducidos a 5 megapíxeles mediante una matriz tipo Quad Bayer para ofrecer una mayor luminosidad.
Otros cambios destacables son el reposicionamiento del lector de huellas dactilares a una posición más fácil de usar, una nueva construcción que ahora brinda cierta resistencia al agua, sin llegar a convertirlo en un móvil sumergible, el uso de una batería de mayor capacidad y diversos cambios en el software centrados en mejorar las posibilidades de la pantalla exterior.
El Motorola Razr 5G saldrá próximamente a la venta en Europa con un precio de
1.499 euros.
Fuente: Motorola