Entonces ponerse como una locaza y aplaudir a rabiar cuando gana el torero es apreciar el arte pero hacerlo cuando gana el toro es ser un cabrón insensible.
¿Más o menos es así la cosa?
Aderezado con palabras que quedan de puta madre y están de moda como demagogia o hipocresía que aunque no se tenga ni puta idea del significado da igual, la cosa es ponerlas que le da elegancia al mensaje de turno.