Descanse en paz, el tio Phil formó parte de mi adolescencia y esos capítulos en los que demostraba cuanto le importaba un alocado Will Smith bajo esa fachada de ogro terrible son imborrables para mí.
No puedo ver el capi del Principe de Bel Air en el que Will reencuentra y pierde de nuevo a su "padre" sin que se me salten las lagrimas.
Actorazo.