Yo diría que no, el control sigue siendo una especie de "Brake to Drift", la música es reguetón y raperos baratos, mientras vas conduciendo no paran de lanzarte comentarios infantiles y de temática "woke" y su sistema de progresión se siente lento a propósito, se abusa mucho de gastar pasta para entrar a competir y de perderlo todo al ser arrestado, además ahora encima tienes pase de batalla por 10€ que es lento de subir, eso sí, si lo completas te llevas una decoración del Quattro de Michèle Mouton.