La cada vez más
estricta regulación del mercado de los videojuegos en China ha provocado que NetEase y Tencent acudan al mercado internacional en busca de nuevas oportunidades para seguir creciendo. Las dos compañías han adquirido total o parcialmente equipos de desarrollo por todo el mundo y también han fundado de nuevos. Una buena parte de ese dinero se encuentra en Japón, que a pesar de ser uno de los mayores mercados de videojuegos del mundo no ha cumplido con las expectativas de los gigantes chinos. Ante esta situación y según
Bloomberg, ambos están reconsiderando su estrategia en el país
La primera medida la ha tomado NetEase, que habría despedido a prácticamente toda la plantilla de Ouka Studios como paso previo a cerrar el equipo de desarrollo. Esta compañía fundada en 2020 cuenta con varios veteranos de Capcom y Bandai Namco y su principal trabajo ha sido Visions of Mana, que ha llegado a las tiendas esta semana con un buen recibimiento. En 2022 Ouka Studios tenía tres juegos en desarrollo: un RPG de acción, uno basado en una serie conocida y uno de acción cooperativo. Al ser preguntada por Bloomberg, NetEase ha dicho que no tiene nada que anunciar sobre Ouka Studios.
Está por ver si estos movimientos por parte de NetEase afectan a
Nagoshi Studio, el equipo que Toshihiro Nagoshi, creador de la franquicia Yakuza y exjefe creativo de Sega, abrió en 2022 gracias a la financiación de la compañía china. Además, NetEase es propietaria de
Grasshopper Manufacture (No More Heroes), el estudio de Goichi Suda.
Por su parte, Tencent estaría reconsiderando la ambición de las inversiones en Japón y ya se había retractado de varios compromisos para financiar nuevos juegos. La compañía tiene varios acuerdos en este mercado y uno de los más destacados lo firmó en 2023 cuando adquirió los derechos para desarrollar y publicar la versión para móviles de Blue Protocol de Bandai Namco. El objetivo era transformar el juego en una franquicia, pero esta misma semana el editor japonés ha
anunciado el cierre del juego, que tampoco llegará a Occidente.
Las fuentes consultadas por Bloomberg sostienen que uno de los puntos de fricción es el deseo que tienen los desarrolladores japoneses de controlar de forma estricta lo que se puede hacer con su propiedad intelectual. También se habla de falta de ambición por parte de los nipones. Tencent aspira a crear grandes franquicias que pueda llevar al mercado internacional, mientras que una buena parte de los creadores locales son expertos en proyectos a menor escala y riesgo. El mercado interno japonés es muy fuerte, pero muchos de sus juegos no son viables para la distribución internacional.
Otro de los motivos que habría llevado a NetEase y Tencent a reconsiderar su estrategia en Japón es la reactivación del mercado chino tras varios años de estancamiento. Además, su mercado local está produciendo éxitos internacionales como Naraka: Bladepoint (NetEase) y recientemente hemos visto a Black Myth: Wukong superar los
10 millones de unidades. Tencent tiene una participación del 5 % en Game Science.