Iba de camino al hotel cuando con mi pareja decidimos bajar en la estación de Japan Rail más random del camino para investigar un poco de Japón sin turistas.
Bajamos en JR-Ogura para dirigirnos a un Bookoff (tienda de segunda mano) donde habían cero extranjeros, gran sitio donde comprar buenos juegos.
Al salir seguimos explorando y OMG, de cara con el museo mientras estaba en construcción. Una lástima no haber podido visitarlo.
Me extrañó mucho la ubicación pues era una zona donde no parecía que había ningún turista (y además calles vacías de gente) y ahora me da pena por que será de las estaciones más concurridas con ríos de gente pasando por las calles residenciales para entrar al museo.