Me gustan las portátiles, de hecho estoy acostumbrado a la forma de jugar en las portátiles...
Sin embargo con la Switch, rara vez lo hago, a veces cuando cambio de habitación o en la cama (no la saco de casa), el mando pro es una maravilla, y el mando perro (como vulgarmente se llama) también lo pruebo de vez en cuando (más que nada para probar los joy-con alejados), y aunque la principio respecto al pro cuesta un poco, al cabo del tiempo te acostumbras y el mando perro también se juega estupendamente.
Sin embargo, debido a las dimensiones de la consola en modo portátil al no tener los agarres habituales del pro o del perro ahora me cuesta más jugar en modo portátil, a parte del miedo que me da que se me caiga... Falta le hace a la consola tener una correa la verdad...