Lo que me ha parecido el juego:
En una Nueva York distópica del futuro interpretamos a James, un detective que cumple con todos los estereotipos del "noir detective"; un pasado que le atormenta, la muerte de algún ser querido, alcohólico, fumador, cínico... Mezclado con elementos de ciencia ficción, muy al estilo Blade Runner, Matrix, Minority Report o Altered Carbon, Nobody Wants to Die nos presenta la idea de vivir eternamente, donde los ricachones se compran cuerpos jóvenes para transplantar su conciencia a éstos y así vivir eternamente. Plantea buenísimas ideas muy bien ejecutadas, tanto que darían pie a una película brutal si llevasen a cabo a la gran pantalla. Este walking simulator con toques de investigación cumple con una producción de un altísimo nivel; gráficos espectaculares, buena narrativa, grandes interpretaciones de voz, pero llega a su desenlace con más preguntas que respuestas para mi gusto.
Como cualquier buen walking sim que se precie aquí manda la narrativa, y por suerte Nobody Wants to Die la ejecuta con maestría. Sus ideas son inteligentes y todo lo que plantea encaja en el universo ficticio creado. La idea es que puedes transferir tu conciencia en forma de chip ("ichorite" en el juego) a otros cuerpos. Da igual que tu cuerpo muera siempre y cuando este chip se mantenga intacto, pero todo transfer conlleva un riesgo y puedes sufrir problemas de des-sincronización y otros problemas mentales. Nuestro protagonista, James, investiga el caso del supuesto suicidio de un ricachón y de ahí la historia va progresando. Usamos diferentes artilugios para "recrear" las escenas de los crímenes, en busca de pistas, manipulando el tiempo o usando nuestros rayos X o ultravioletas para buscar restos de fluídos, sangre o trayectorias de balas o sistemas eléctricos. Le da un ritmo interesante ya que debemos investigar cada escena del crimen, alejándose de la narrativa de los walking sims e implicando más al jugador. Al final de cada crimen debemos unir las pistas obtenidas para entender los motivos de estos crímenes. Son las partes donde el jugador más se tiene que meter en el papel de investigador, empatizando con nuestro protagonista y aglutinando el argumento que nos propone. Como cualquier walking sim es un juego increíblemente lineal donde debemos dejarnos llevar por su historia, la cual he de decir que es bastante interesante a poco que te guste el cine de ciencia ficción.
No nos llevará más de 5 o 6 horas completar el juego, así que se pasa en un santiamén. Su recreación de una Nueva York asumida en las clases económicas, el poder y la pobreza, sus increíbles vistas desde nuestro vehículo volador sobrevolando los barrios bajos, su constante lluvia. Es un juego que entra mucho por los ojos, hubiera deseado poder explorar más estos fantásticos escenarios creados, dado que no son demasiadas las localizaciones que visitaremos. Pese a que la narrativa sea buena pienso que al llegar a su desenlace te quedas con ganas de saber más, dado que el juego termina de manera un poco abrupta sin resolver muchos de los enigmas que te lanza. Concluye la historia en un hipotético final abierto que podría dar lugar a una posible secuela en un futuro (ojalá). Si te gusta la ciencia ficción y los walking sims no dejes escapar esta gran aventura.
Nota 8/10.