Pues el pc grande (ya no lo uso de servidor, ahora uso la PCra) es "BlueIce", que en realidad viene de "Ojos Azules", una amiga mia que tubo un accidente muy grave el dia que lo "termine"
Luego tengo el portatil que se llama "Spark", debido a que el primer dia, nada mas sacarlo de la caja y trastearlo, peto el enchufe en el que lo conecte. Salto por los aires llevandose consigo el enchufe a la bateria.
Luego esta "Basurero", alias el ibm de sobremesa de mierda que se derritio y al que tube que hacerle un modding de emergencia, dejandolo en el hierro solo. ¡¡¡Aun funciona!!! Parece que ese pIII 663 modificado para ibm para que fuese a 500 sin mejorar nada es indestructible. Lo uso por el mero placer de ver cuando explota tercera y ultima vez.
Y lo ultimo es el nuevo y flamante (flameante) servidor, "Grillo", que me encontre en mitad de un monte (como lo ois) hace no llega a 15 dias.
Es un pentium3 xeon con un giga de ram.
¿Que hacia en el monte?
Pues hacia compañia a unas 20 impresoras, unas cuantas pantallas rotas, unos 6 ordenadores desechos, y un g3 pitufo calcinado.
Solo el estaba indemne (salvo por un hueco en la caja)
Lo descubri un dia mientras iba con la bici por los llanos de tierras del paraiso en cuenca. Un agradable ovejero, con sus correspondientes fabricas de mierda y lana, se dedicaba a lanzarles piedras mientras los bichos comian hierba.
Le pregunte...¿Sabe que es eso?...y no lo sabia.
Les tiraba piedras porque alguien habia soltado su chatarra por donde acostumbraba a pasar
Me veis a mi llevandome lo poco bueno, y el Xeon, en la bicicleta...durante 20km de piedras y baches....
Al final llego todo (salvo un hd que se me cayo en una cuesta y revento).
Cuando al fin miro el pc, lo limpio y tal...lo enciendo...y oigo: BRrrrcht
No supe que fue hasta unos dias mas adelante.
Por las noches, en mi cuarto de madrid sonaba un grillo.
El mosqueo fue tremendo.
Al final resulta que habia un par de grillos en el disipador del procesador, que ni miré. Uno murio en el encendido...pero el otro consiguio escaparse. Y de ahi el nobre del cacharro