De todas formas la culpa la tiene el ejecutivo al jugar con la tontería esa de hablar de crisis o desaceleraciones. Razón no les falta al entender que el gobierno no puede convertirse en un altavoz alarmista, debido a su responsabilidad. Pero es tan poca la diferencia con una palabra que con otra que da igual.
Al final es lo mismo, y como con las acciones se demuestra todo, el hecho de que hace unos meses el ejecutivo lanzara un montón de medidas (acertadas o no) para luchar contra el problema financiero español, demuestra que real y efectivamente, nunca lo ha negado.
Y al final, ¿qué pasa?, que el señor diputado del PP lanza una pregunta estúpida y que no lleva a nada en el congreso a Solbes con el jueguecito de palabras de "crisis" o "no crisis", y Solbes se presta a contestar semejante gilipollez. Con lo que al final se pierde el tiempo y no se avanza, que por cierto, parece ser que el lo que algunos pretenden y desean, vistas las risotadas que se echan en el hemiciclo.