Una de las costumbres más arraigadas dentro de la comunidad internauta es disponer una clave infranqueable en las conexiones Wi-Fi domésticas para evitar cualquier intrusión. Sin embargo, la coalición
Open Wireless Movement se ha puesto como objetivo cuestionar esta sabiduría popular demostrando que la idea contraria también cuenta con sus propias ventajas en materia de seguridad y eficiencia.
La Open Wireless Movement incluye entre sus miembros a la Electronic Frontier Foundation (EFF), Free Pess, Mozilla o The Internet Archive. El objetivo de la organización es promover la apertura de las conexiones Wi-Fi para ofrecer un Internet ubicuo y descentralizado que rompa por completo la relación entre dirección IP y usuario.
Para desarrollar esta iniciativa, el grupo lanzará el mes que viene un
firmware open-source para
routers que permitirá abrir una segunda "red para invitados" ofreciendo libremente una porción de la conexión disponible. Esta red abierta funcionará de forma independiente a la conexión principal del usuario bajo clave y contará con menor prioridad a la hora de consumir ancho de banda.
La organización asegura que la disposición de una red global con puntos de acceso a corta distancia sería mucho
más eficiente que cualquier otro tipo de configuración. Asimismo, el activista de la EFF, Adi Kamdar, explica a
ArsTechnica que dentro de esta estructura "cada conexión está amurallada frente a otras conexiones", reduciendo el riesgo de intrusión.
Como fin último, la descentralización de las conexiones permitiría borrar el nexo teórico entre IP y usuario. "Desde una perspectiva legal, hemos estado intentando placar la idea por la que abogan algunas autoridades de que tu IP está relacionada a tu identidad", comenta Kamdar. "No deberías ser el blanco de un
troll de
copyright solo porque saben tu dirección IP".
Precisamente en el
marco legal, la Open Wireless Movement todavía se lava las manos en la seguridad de su iniciativa. Esto es debido a varios casos en los que el peso de la ley ha caído sobre el propietario de una conexión después de que un vecino "invitado" realizara actividades ilegales con ella.