Siempre hay profesiones más propensas a que acabes metiéndote de todo que otras. Concretamente, la gente que trabaja en "el mundo de la noche", y más específicamente en espectáculos, fiestas, etc. etc. donde la droga corre a ríos, pues siempre lo van a tener más accesible y la tentación será mayor, simplemente porque el ambiente arrastra y a día de hoy en esta sociedad es casi inconcebible la diversión nocturna sin drogas.
Aunque está claro que cualquiera puede drogarse, una gogó, un camarero, un grupo musical o un portero de discoteca literalmente están rodeados de ellas contínuamente, algo que no se da en otras profesiones.