Jur...
Ibas a la tienda; allí tenían la reserva, con tres papelillos calcables.
Uno para ti, otro para la tienda y otro para Sony.
En los datos tenías que poner la tienda en la que ibas a recoger/comprar la consola.
El papel de Sony lo mandabas a ellos por correo. Se asignaban las consolas por recepción de reservas, y muchos usuarios recibieron la llamada de Sony para confirmar esa reserva y la recepción de la misma.
Había un número de consolas limitado, y una lista que apareció en Marca con el número de serie de las reservas; si no estabas en esas páginas del periódico, no tenías consola.
No había que pagar nada.
Un saludo.