Conocida en tiempos por sus populares navegadores y manos libres para automóviles, Parrot ha decidido volcarse durante los últimos años en nuevas categorías de productos para reducir su dependencia de un mercado cada vez más erosionado por los
smartphones y los centros multimedia de los coches modernos. El audio y sobre todo los
drones han sido sus apuestas para diversificar su catálogo, pero la firma francesa acaba de reconocer que las cosas no le están yendo tan bien como esperaba con el anuncio de que despedirá a una tercera parte de su división dedicada al desarrollo de drones.
Según ha informado la empresa, 290 de los 840 empleados de su departamento de drones deberán buscar un nuevo trabajo después de que la compañía haya declarado unas ventas de 85 millones de euros, sensiblemente por debajo de los 100 millones de euros que esperaba. Más aún, la compañía ha reconocido que sus drones no generan beneficios, obligando a reorganizar esta área de negocio.
Parrot se ha volcado durante 2016 en la promoción de sus drones y las posibilidades que brindan. De acuerdo con las cifras facilitadas por la compañía, la venta de drones generó un total de 60 millones de euros, de los cuales 11 millones de euros se corresponden a productos de uso profesional y el resto a modelos de consumo como sus
minidrones, básicamente juguetes de iniciación para aficionados. Estas cifras de negocio son muy superiores a los 23 millones obtenidos por su división automovilística, con la diferencia de que esta sí que ha cumplido las expectativas.
La nueva estrategia de Parrot pasa por reducir la gama de aparatos de consumo y mejorar su márketing, "capitalizando en particular la experiencia lograda con los drones comerciales". Esta cita hace pensar que Parrot podría reducir el peso de sus productos de menos categoría para centrarse en el segmento
prosumer.
Por otro lado, los drones comerciales parecen estar funcionando bien (o al menos Parrot cuenta con ello), puesto que la compañía seguirá invirtiendo en ellos desplegando una oferta integrada de hardware y servicios que podría ser de interés para en industrias como la agricultura, la inspección de infraestructuras y la creación de mapas. Este es un mercado en el que Parrot ya ha metido una buena cantidad de dinero, haciéndose con el control total o parcial de varias compañías especializadas en software para drones como SenseFly y Pix4D.
Parrot anunció el año pasado el Disco, un drone de ala fija muy sencillo de pilotar. Cabe señalar que Parrot no realizó ningún anuncio importante durante este pasado CES, dando a entender que no hay planes para realizar nuevos lanzamientos de forma inmediata.
Fuente: Parrot