Si alguien pensaba que la industria del videojuego ya había terminado con los despidos, no podía estar más equivocado. People Can Fly, el estudio polaco responsable de Painkiller, Bulletstorm y Outriders, ha anunciado una reestructuración que supone el despidos de más 120 empleados y una revisión de su estrategia de autopublicación que se lleva por delante Project Victoria, un título que aún no había sido presentado. Otro proyecto conocido bajo el nombre en clave Bifrost verá reducida su escala.
Sebastian Wojciechowski, director ejecutivo de People Can Fly, ha comentado en
un mensaje publicado en Twitter que estos movimientos se deben "a presiones externas del mercado" que van más allá de lo que la compañía esperaba. "El mercado de la industria del videojuego sigue evolucionando y nosotros tenemos que adaptarnos a la situación actual", dice Wojciechowski. El ejecutivo añade que están ampliando los trabajos por encargo, mientras que la estrategia de autopublicación se limita a día de hoy a un único juego (Project Bifrost).
People Can Fly dice creer en sus equipos, sus juegos y su potencial, pero debe ajustar sus planes en función de sus capacidades financieras. Esta es la segunda reestructuración que sufre el estudio polaco en 2023. El pasado enero la compañía anunció el despido de unos 30 empleados y en abril
canceló Project Dagger, una nueva propiedad intelectual de acción y aventura que inicialmente iba a publicar Take-Two. El editor
rescindió el contrato y People Can Fly decidió seguir adelante, pero finalmente desechó el proyecto.
Estos movimientos se limitan a la estrategia de autopublicación de People Can Fly y salvo sorpresa no afectan a los juegos por encargo que tiene entre manos. En este sentido, el estudio polaco está trabajando en Project Gemini para Square Enix y
Project Maverick para Xbox Game Studios. Por ahora ninguno de estos dos títulos ha sido presentado y lo único que sabemos de ellos es la existencia del contrato entre las partes. Sobre Project Maverick podemos añadir que su presupuesto es de entre 30 y 50 millones de dólares que aportará Microsoft en su totalidad.
En lo que va de año, la industria del videojuego ha despedido a cerca de 15.000 trabajadores, más que los 10.000 que se vieron afectados por los recortes en todo el 2023 o los 8.500 de 2022. Microsoft Gaming, Bungie, Take Two Interactive, PlayStation Studios, Activision Blizzard o Unity han sido algunas de las compañías que han ejecutado algunos de los mayores recortes de personal.