keo01 escribió:Vale, a ver...
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Puedo decir que hoy han hechado bastante rato, una tal fuminaya o algo asi que decia q un tipo argentino era un maltratador, se ve que es primo de una de gran hermano, y bueno, lo unico que han hecho ha sido acusarlo durante mas de media hora de una cosa bastante grave,
Parece mentira que una tia, como la fominaya esa, que SE HA DEMOSTRADO que maltrataba psicologicamente a su ex ( exfutbolista del deportivo de la coruña) entre en el juego de Sardá.
Por culpa de este programa y muchos mas del estilo, ( Campos, Ana Rosa Quintana, etc etc etc ) se ha conseguido que un mal social como es el tema del maltrato se convierta en UN CIRCO TELEVISIVO y así pasa, muchísimas denuncias inventadas, jueces hasta las narices del mismo tema pasando, y las 4 pobres que de verdad si son maltratadas no les hacen ni puto caso por culpa de las 40 que no lo son y denuncian para entrar en este circo.
En cuanto a Sardá, que buenos momentos con su programa de radio, con el señor casamayor y compañía, y que buena su primera temporada, cuando trataba temas serios, con invitados serios ( hace cuanto no va el señor carlos carnicero a hablar ??? ).
Temas como el GAL, Banesto, Gil y Gil etc etc etc perdieron su sitio por 4 putonas y 4 pseudo-homosexuales con ganas de dar la nota y de acusar sin prueba alguna por 3.000 € la sesión.
No llamó hija de puta a la Aida esa y la dijo que no volveria a su programa por meterse con un pobre paralitico ???? Que hacía hace mes y medio de nuevo ahi ??? Que pena de verdad, faltar a tu propia palabra solo por crear audiencia.
Y que nadie piensa que sardá solo es el presentador y le plantan ahi a la gente sin voz ni voto, no, el es el director y productor del programa, el decide quien va, quien no va, de que se habla y cuanto se paga. Así pasa, llevar a profesionales del periodismo, de la politica, de la psiquiatría y de la medicina cuesta mucha pasta y crea poca audiencia, las 4 zorronas estas salen baratas y crea mucha audiencia, mayor beneficio, menor gasto y mas para mi bolsillo.
Que pena Sardá...