El mando es lo que más temo, agradezco el cambio de diseño ya que nunca he podido sentirme agusto con ninguno de los dualshock. Se me hace muy pequeño de coger, la colocación de los analógicos me resulta demasiado incómoda, mucho más en FPS aunque también lo sufrí mucho con los Uncharted entre otros, se me hace muy difícil apuntar hasta el punto de desesperarme, todo lo contrario que con el mando de 360 que me parece perfecto y me adapto sin ningun problema en cualquier tipo de juego.
Me gusta el cambio de gatillos, y que los analogicos no sean tan setas porque se me resbalaban los pulgares cosa mala, al menos con la nueva forma se me adaptarán mejor. Espero adaptarme pronto porque me encantaría estrenar PS4 con Battlefield