Sinceramente viendo las estrategias y la nefasta y errática política comercial que lleva Sony, me sigue asombrando las, para mi, injustificadas ventas de PS4. Este golpe gratuito e innecesario a la PSP - y sobre todo a sus millones de usuarios - lo confirma. Fiarlo todo a la PS4 y dejar otros productos abandonados o maltratados, no ya la veterana PSP sino la reciente PSVita, es un error garrafal que tarde o temprano les acarreará consecuencias.