No me gusta especialmente la poesía, aunque también he hecho mis pinitos. Para mí es tan personal, que, aún usando un léxico de parvulario podrías emocionar a alguien, cuando otros sólo rebuscarían en la rima y los cultismos que aparecieran.
Dices que estás desentrenado, sin embargo, sabes que el corazón siempre está trabajando.