Esto es como todo, no se puede generalizar:
- Puede tocarte una tía que te corte en plan borde, porque es un simple zorrón insoportable: la respondes en el mismo tono si te apetece, y punto.
- Puede tocarte una tía que te corte en plan casi-borde (muy seca), porque eres el décimo tío que se le acerca en la noche y pasa de contemplaciones. Esto es comprensible, aunque claro, si tú no vas en mentalidad baboso de arrimar cebolleta como quiera que sea, te jode la respuesta. Si eres capaz de darte cuenta de que la tía está en esta situación, lo mejor es despedirse de buenas e intentar quedar bien por si te la vuelves a encontrar en otro momento de mejor humor (y si entonces se repite el borderío, te olvidas de ella para siempre).
- Puede tocarte una tía que sin ser borde, te diga de forma directa que no le interesas lo más mínimo, y claro, eso te jode un montón si tú estás por ella en plan colao. A la larga, cuando se te pase el enchochamiento, se lo agradecerás.
- Lo más habitual al entrarle a alguna conocida con la que tienes trato y tal, es que se hagan las suecas o traten de ser ambiguas para no darte con la puerta en las narices directamente, por cariño o por educación. Lo malo es que su sutileza a tí te sirve para comerte el tarro y perder el tiempo soñando con que cualquier chorrada que te dijese te da opciones futuras "si me lo curro bien".
- El caso más jodido es cuando ya estás saliendo con alguna y no tiene el valor de decirte a la cara que quiere cortar, y se dedica a darte largas o estar cada vez más fría sin motivo.
Así que más vale las cosas a la cara y rapiditas, que a la corta joden pero a la larga se "agradecen". Y cualquiera que lo haya pasado estará de acuerdo.