Pues el título resume el desastre.
Resulta que un cable USB a microUSB que aparentemente no tenia daños y ha sido utilizado durante mucho tiempo para cargar móviles y otros aparatos, a provocado que la Raspberry pi "explotara" y a través del cable HDMI (que también ha muerto) se ha cargado la TV.
Según parece se han cruzado los cables del USB provocando un corto que no le ha sentado nada bien a la Raspberry. No me imaginaba que pudiese provocar tal desastre, pero al enchufar se ha escuchado un petardazo y posterior olor a quemado.
La parte del conector microUSB y algún otro componente electrónico cerca del HDMI han quedado totalmente negros, y la carcasa también.
La TV estaba conectado a este por HDMI, aunque estaba apagada no le ha sentado nada bien y ya no ha arrancado más.
Por lo tanto la broma ha salido cara.
Aún tengo la duda de si el problema no ha sido el cable en si, si no una tarjeta de sonido USB que quería probar (recién comprada), pero lo dudo, y mañana saldré de dudas probándola con un PC viejo (por si peta).
Alguna foto del estropicio:
La que puede liar un cable aparentemente sin daños.