El número de julio de la revista
Game Informer muestra las primeras imágenes y detalles de la esperada tercera entrega de la saga Max Payne.
El juego transcurrirá 12 años después del final de la segunda entrega, en Sao Paulo, donde Max trabaja en la seguridad privada de una adinerada familia. Además de calvo, ahora Max es adicto a los analgésicos, lo que será de nuevo parte vital del sistema de juego. Los escenarios serán totalmente destructibles, y el tiempo bala será "
más visceral y ultra violento", en palabras de Rob Nelson, de Rockstar:
Hemos tomado y ampliado todos los elementos tradicionales de Max, de modo que el juego se convierte en ballet, o gun-fu, o lo que quieras llamarlo.
También se habla del sistema de cobertura, el cual "
no es vital para el desarrollo del juego, la experiencia de este mundo no es sólo cubrirse, disparar, y pasar a la siguiente cobertura", pero será realista, permitiendo usar escudos humanos.
Game Informer también confirma que el juego incluirá modo multijugador, pero no han trascendido detalles.