Seguramente no desconectaste físicamente el SSD SATA donde ya tenías instalado Windows anteriormente, y el arranque de Windows se instaló en dicho disco, en vez de en el NVME.
Desconecta físicamente los cables de los discos SATA que tengas, vuelve a instalar Windows formateando el disco M.2 NVME (dejando conectado solamente ese disco M.2 NVME) y cuando ya haya terminado la instalación de Windows, apaga el equipo completamente (apagando el botón de la fuente e incluso mejor quitando el cable del enchufe) vuelve a conectar a la placa base los discos SSD SATA de 500GB y también el HDD de 1TB antes de volver a conectar la fuente y, en el primer arranque, entra en la BIOS antes de arrancar Windows, y revisa que tengas seleccionado el disco NVME como predeterminado de arranque.
Saludos.