Esos ficheros .bin normalmente son unos archivos mostruosos cuyas primeras líneas son un script de bash y que a partir de una determinada marca contienen un .tar.gz o tar.bz2 o algún otro tipo de archivo comprimido.
Yo no me suelo fiar: miro el ".bin" con more, detecto la marca (que se ve a simple vista porque a partir de ella empieza a aparecer "basura" ilegible) y después con head y tail independiezo el script de la parte comprimida. Compruebo con file qué tipo de archivo comprimido es y le cambio la extensión.
A partir de ahí ya miro qué hacia el script y qué ficheros contiene el archivo comprimido, dónde se iba a realizar la instalación, etc. Incluso se puede llegar a generar un fichero .deb para que la instalación sea más limpia.