Todos sabemos que los meses de julio y agosto se han respetado siempre por temas de vacaciones para la celebración de Elecciones Generales o de cualquier tipo. Es raro, que alguien no tenga algunas semanas de vacaciones en los citados meses. Este año al parecer se ha roto el "pacto".
Cuando la Administración Pública celebra cualquier tipo de oposiciones, concursos de oposición/méritos, concursos de méritos, concursos de destinos, etc., son siempre los funcionarios públicos los que se encargan de llevar todo esto: creación de exámenes, corrección, llamamientos, recuento de puntos en los méritos, y un larguísimo etcétera.
En España hay alrededor de unos 470.000 políticos: ministros, alcaldes, senadores, concejales, parlamentarios autonómicos/europeos, diputados, diputadas, etc. Seguro que me dejo algún tipo de político.
Mi propuesta es la siguiente:
¿Por qué no se encargan ellos de ser parte de las Mesas Electorales siempre que haya elecciones de cualquier tipo?. Hay suficientes para que se vayan turnando como hacen el resto de funcionarios con el resto de eventos públicos. Así viven el día de la celebración de la Democracia en primera persona y viven la experiencia de pasar 14 horas en un centro educativo público sin aire acondicionado en pleno mes de julio.
Esto se lo propuse a un amigo. Me contestó que con la cantidad de mentirosos, trepas, ladrones, etc. que hay entre los políticos, que las Elecciones no tendrían ningún tipo de credibilidad, sobre todo, a la hora del recuento de los votos.
Solución: ¿y si ponemos en cada Mesa Electoral a uno del PP, a otro del PSOE, otro de Podemos y otro de VOX, y que el recuento lo hagan todos?
Creo que esta propuesta la debería llevar algún partido político para debatirla en el Senado.