Técnicamente Qualcomm ya había anunciado su
Snapdragon 835 hace algunas semanas, pero el fabricante de microprocesadores (y muchas otras cosas más dentro de la industria móvil) ha querido esperar al CES 2017 para proporcionar todos los detalles del que será su
chipset estrella para este año que acaba de comenzar.
Heredero directo del exitoso Snapdragon 820, que hoy por hoy encuentra su lugar en numerosos teléfonos insignia, el nuevo Snapdragon 835 será el primer
chipset fabricado en masa usando un proceso FinFET de 10 nm, para lo cual ha pedido una mano a la división de producción de semiconductores de Samsung. También será el
primer procesador ARM en poder ejecutar Windows 10 a un nivel virtualmente completo, abriendo las puertas a la aparición de toda una nueva categoría de tabletas y ordenadores de bajo coste.
Para el Snapdragon 835 Qualcomm ha modernizado la conocida arquitectura Kryo de los
chipsets 82x, añadiendo cuatro núcleos adicionales (ahora pasa a ser un
octa-core) para optimizar la gestión de recursos al distribuir tareas entre cuatro
cores a 2,45 GHz y otros tantos a 1,9 GHz. Según la firma estadounidense, a pesar de este incremento en núcleos de procesamiento el Snapdragon 835 es un 35% más pequeño y un 25% más eficiente, todo gracias a su nuevo proceso de producción. Habrá que ver si luego esto se traduce en una mayor autonomía fuera de los laboratorios.
A nivel de prestaciones, el Snapdragon 835 se brindará soporte para numerosas tecnologías emergentes que hasta ahora requerían soluciones dedicadas o procesadores fabricados por la competencia. Las mejoras a nivel gráfico, con una GPU Adreno 540, se estiman en torno a un 25% en términos de velocidad de renderizado, haciendo posible ejecutar contenidos de realidad virtual con mayor suavidad, ofreciendo compatibilidad con
Google Daydream. Otro detalle interesante es el soporte para cámaras sencillas de hasta 32 megapíxeles o de doble sensor con una resolución máxima de 16 megapíxeles, con la capacidad de grabar vídeo en formato 4K a un máximo de 60 FPS. Además, el procesamiento de audio ha sido mejorado.
Por último, Qualcomm ha incorporado en el Snapdragon 835 un veloz módem X16 LTE Cat. 13 y el nuevo sistema de carga Quick Charge 4.0. La gran ventaja ofrecida por QC4.0 frente a otras tecnologías análogas no es tanto su capacidad para cargar el 50% la batería de un móvil en 15 minutos, sino el hecho de que es totalmente compatible con la especificación USB-C, por lo que no debería tener problemas a largo plazo
con futuras actualizaciones de Android.
Según ha señalado Qualcomm, la producción del Snapdragon 835 ya ha comenzado con vistas al lanzamiento de los primeros dispositivos durante la primera mitad de 2017.
Fuente: Qualcomm