SuperSilvia, imagino que será porque lo que les gusta es cobijarse en rendijas, debajo de la corteza de los árboles y demás sitios oscuros y estrechos. Ahora bien, el porcentaje de verdad o fantasía en eso de las orejas ya no lo sé, igual a alguien se le metió una en el oído por casualidad o porque buscaba un sitio calentito para descansar y desde entonces se ha creído así, igual que lo que dices de las moscas. Además, ¿a quién no se le ha metido un mosquito por el oído? Mira que son puñeteros...
¿A qué clase de campamentos has ido tú, pillina?
![maloso [666]](/images/smilies/nuevos2/masmalo.gif)
La verdad es que casi que prefiero una cucaracha...
Lo que ha dicho QUoi2k me ha recordado a lo que pasó cuando tenía 8 ó 9 años -estaba tomando la comunión, así que esa edad tendría- y mi madre era tan inconsciente como para dejarme tener una serpiente en casa. Pero para inconscientes yo, que le dejé abierto el terrario y se fue de vacaciones durante casi dos semanas en las que pensé que se habría metido detrás de algún mueble y la habría palmado allí, la pobre
![decaido [decaio]](/images/smilies/nuevos2/decaido.gif)
. Pero hubo suerte, no podéis imaginar mi cara de felicidad cuando una mañana mi madre metió el pie en una zapatilla de andar por casa y adivinad lo que salió...
Ni qué decir tiene que la serpiente se mudó a un entorno mucho más libre y saludable que mi terrario aquella misma tarde, pero al menos ya tenía algo que contar a sus amigas -de todas formas pensaba soltarla, no aguantaba ver cómo se comía a las ranas que le daba-.