Si fuese mi última semana de vida, seguramente venirme abajo y pasarme el día lloriqueando. Es bonito eso de pensar en aprovechar el tiempo al máximo, pero yo no creo que fuese capaz, me amargaría mucho.
Si fuese una semana donde puedo hacer nada sin consecuencias... pues creo que soy como tú, me hartaría de zampar cosas ricas
. Además, me gastaría el dinero en viajes y cosas que no me puedo permitir normalmente (imagino que al volver atrás, ese dinero no me lo he gastado, ¿no?
). Tampoco sería infiel, es algo que no hago porque no me apetece, no porque tenga la obligación (si quisiera irme con otras personas, tendría una relación abierta y solucionado).
No cometería ningún tipo de maldad, mi moral me impide hacer cualquier cosa que haga daño a otras personas, independientemente de si hay consecuencias por ello o no. Así que me limitaría a disfrutar de la buena vida, con eso ya me sentiría muy satisfecha