Batman Begins: al principio no daba un duro por él, pero fue una agradable sorpresa. Es como una mezcla de Metal Gear+Splinter Cell con los toquecillos habituales de cualquier juego de superhéroes. Controlas a Batman y, dado que no eres un ser sobrenatural, tus armas, tus gadgets, el sigilo y el provocar miedo a tus adversarios son los elementos con los que debes avanzar en el juego. Hay acción, infiltración, niveles con vehículos, aventura y hasta hay una fase pelín terrorífica en el Arkan Asylum (el manicomio de Gotham).
Ese juego merece ser reivindicado, opino yo.
Saludos.