Si vas a emborracharte, no hace falta irte de vacaciones a Mallorca, quédate por tu casa o a cualquier zona costera del Mediterráneo. Si aún así, insistes, el garrafón podrás encontrarlo en Magaluf y en Arenal, donde miles de borrachos ingleses o alemanes, dependiendo de tu elección, amenizarán tu velada con gritos, destrozos, vómitos y música de discoteca que hace sangrar los oídos.