La realidad virtual sigue muy asociada a los videojuegos, pero tiene otras aplicaciones fascinantes. Por ejemplo, hace unos meses conocíamos un entorno de síntesis modular virtual que nos dejaba con la boca abierta, aún a pesar de su aspecto primitivo. Y en el terreno de la enseñanza a distancia, la VR tiene mucho que aportar, al homogeneizar el entorno de aprendizaje y abrir infinitas posibilidades en cuanto a los materiales de trabajo (eliminando además sus costes).
Así lo ha interpretado Pioneer DJ, que se ha unido a Tribe XR para configurar un proyecto de escuela para DJs basado enteramente en realidad virtual. Te pones los cascos, y listo: se muestra ante ti un flamante set de reproductor y mixer CDJ-3000S y DJM-900 NXS2 que podrás manosear sin miedo a romper nada.
En Tribe XR puedes colaborar con otros DJs en el entorno virtual, o recibir lecciones de tus profesores en vivo, aunque también cuenta con vídeos ya grabados con lecciones básicas de DJ Hapa. La música la eliges tú: puedes cargarla desde Rekordbox, o utilizar tus setlists de Beatport Link y Soundcloud Pro.
En cuanto a precios, Tribe XR está disponible en las plataformas Steam, Quest y Rift. En estas dos últimas sale por 29,99 euros, con una suscripción de 4,99€ al mes. En Steam sale por 24,99€ la versión normal, 28,20€ la versión con cuatro decks y 34,98€ la Deluxe (que ofrece además funcionalidades de streaming). Y obviamente, necesitarás un casco de realidad virtual.
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Tribe XROpinión personal, el precio, para variar, es más rentable en Steam que en Oculus, eso si, en Oculus te da la libertad de que es crossbuy y su compra te vale tanto en las Quest de forma standalone como en Pc a través de Oculus, las expansiones, pues algunas meramente de diseño, como hacer que los reproductores sean dorados y otra amplia sus capacidades, pudiendo tener 4 decks en vez de 2 o incluso una mesa de mezcla de vídeo que funciona bajo resolume, imprescindible tener este para poder lanzar visuales en las sesiones.
De forma colaborativa funciona a las mil maravillas, puede incorporarse otro u otros djs a la sesión y cada uno pinchar con unos decks, siendo esto toda una experiencia que difícilmente es conseguible de forma presencial y más en estos tiempos.
La usabilidad, tendrían que dar soporte a las manos, con los mandos se hace un poco impreciso en algunos momentos, ajustar cosas como el pitch de los temás de forma precisa es complicado a veces, y para ser exactos muchas veces no queda otra que tirar del odiado sync, eso si, la función de preescucha por cascos, acercándote la mano a cada una de las orejas, una auténtica delicia.
Finalizar diciendo que se puede transmitir de forma nativa por facebook, con el consiguiente riesgo de bloqueo por copyright, así como por altspace, twitch... a través de OBS, incluso puedes ver el chat de twich en la propia aplicación.
Estaría bien, que pudieras montar tus propias salas o locales para poder crear eventos directamente desde la app y poder invitar a amigos, sería toda una experiencia sin necesidad de terceras apps para lograrlo.
En resumidas cuentas, ojalá hubiera tenido esto cuando comencé a pinchar allá por el 89, un equipo valorado en 6000€ en formato físico, que en realidad virtual se puede conseguir por unos 30€ y en el que, puedes cargar tus propios temas y es compatible con Beatport Link and SoundCloud Pro.
Si te gusta el mundo del DJ, es una gran herramienta, la cual, ha de mejorar en algunos aspectos pero es más que funcional y si, es algo que siempre te ha atraído y nunca has dado el salto por el coste de los equipos Dj, es una excelente forma de dar el salto y comenzar con las clases que hay a través de la propia app, algunas de esas master class, eso si, a través de su suscripción mensual, la cual no es decisiva para usar la app.