Es mejor ser realista, pero también algo optimista.
El motivo es el siguiente. Ser optimista en teoría se dice que ante una caída, es difícil levantarse, ante una torta de la vida. Sin embargo, yo veo de otra manera. Un optimista aunque caiga, no se dejará vencer por las dificultades, luchará hasta lograr su propósito. Si te caes 6 veces, levántate 7. Y pensar que lo vas a conseguir es ser optimista.
Ahora bien, ojo. También en su justa medida. Y eso hablo de ser realista. Es decir, ser optimista si sabes que lo vas a conseguir, pero si por circunstancias ves que es difícil, ante eso es mejor ser realista. Por ejemplo, apruebas una Oposición, pero sabes que al ser concurso, es difícil. Por tanto, realismo.
¿Pesimista? El problema es que ese tipo de personas pueden ser tóxicas. Porque el pesimismo por desgracia se contagia. Que hay quien piensa que es imposible, que las cosas no salen y es un círculo vicioso. No lo consigues, mal te sientes, crees que no vales y vuelta al ciclo.
Espero que se me haya entendido.
Saludos.