Este tema es algo ya muy personal. Por si te sirve de algo, pasé de las consolas con el fin de la anterior generación y acabé con un PC. Sí, me pierdo jugar a los exclusivos de PS4, a los de XONE, al catálogo de 3DS y al de Wii U, pero gano a una plataforma que engloba, además de sus propios exclusivos, a todos los multiplataformas del mercado. Y no sólo te conformarás con éso: en PC podrás jugar a TODO lo que ha salido, ya sea el último juego de 2017, como a esa aventura gráfica que tantas risas provocó en más de un gamer allá por 1990. ¿Y las recreativas?, quizás juegos como Samurai Shodown ya no estaban de moda cuando naciste, pero éso no significa que no puedas jugarlos y descubrir que te lo pasas pipa con ellos. O aquellos míticos juegos que se dejaron ver en la SuperNintendo, Gameboy, MegaDrive, Nintendo DS, PlayStation, Saturn, GameCube o PlayStation 2, y que, hoy por hoy, te sería imposible o muy costoso el poderlos rejugar de no ser por los emuladores para PC. Teclado, ratón, joystick, gamepad, palancas de vuelo, volantes... y hablando de volantes: un amigo juega al Assetto Corsa con un Logitech Formula GP que compró hace la friolera de 16 (sí, dieciséis) años, un cacharro que, de ser para consola, llevaría dos generaciones desfasado y sin soporte.
Una consola tiene sus cosas buenas pero, personalmente, acabé prefiriendo la versatilidad del PC frente a la comodidad de la videoconsola. Para juegos como Uncharted o The Last Guardian, siempre podrás hacerte con una PS4 baratita o tragarte el gameplay al estilo película como hice yo, que no es lo mismo que jugarlo, pero casi.
