"Abro los ojos" Parte 1ª
IGOR, A DÍA DE HOY
Abro los ojos. Aturdido, confuso, perdido, aislado. Pared, pared, pared,pared. Rodeado de grandes muros de piedra con pequeños ventanales, únicamente veo el cielo como salida. Mis dudas acerca de donde estoy y que me ha ocurrido me asaltan continuamente sin conseguir recordar nada acerca de mi pasado y de cómo he llegado a este sombrío lugar. Pasado este interminable minuto de dudas y recuerdos frustrados consigo levantarme sin ningún tipo de esfuerzo. Mi condición física es buena, y razono perfectamente. ¿ Donde coño estoy?.
Cemento. El suelo es de cemento armado, duro como él mismo. El tiempo pasa inexorablemente; mientras mis dudas van acrecentándose hasta que salen a la luz en forma de gritos de desesperación, incertidumbre e incomprensión. ¿ Por qué coño estoy desnudo?. ¿ Quién cojones me ha robado los pantalones?. No hace frio, estoy bien. Examino de cerca los muros que me rodean. Parecen estar construidos con una minuciosa precisión. Los primeros ventanales se encuentran a tres metros aproximadamente, imposibles de alcanzar.
Me desespero, grito, chillo, pero no encuentro respuesta alguna.
- ¿ Qué opina, doctor, tendrá algo que ver con mi abusivo consumo de drogas ?-
- Este tipo de sueños se encuentran directamente asociados al sentimiento de soledad y represión que de alguna manera está poblando su subconsciente. En la próxima sesión estudiaremos las posibles causas de esos sentimientos, son 10000.
- Gracias doctor, me es de gran ayuda.
- Estamos para ello, Igor, para ayudarles.
- Gracias, hasta la próxima.-
- Adios, Igor, adios, recuerda traerme el número de cuenta la próxima visita.
- Descuide, doctor, me acordaré. –
Igor cierra la puerta de la consulta y mira de reojo a la secretaria. No es que esté muy buena que digamos pero le da un morbo de flipar. Se despide y se marcha. Igor es un joven abierto, despreocupado y atento. Sus padres son gente de dinero, no sabe lo que cuesta ganarlo. Por eso se siente privilegiado y a la vez envidiado por muchos de sus amigos. Acude al psiquiatra para conocerse mejor, dice. El Dr. Frederich es un buen psiquiatra y aunque sabe que Igor no le necesita, también sabe el enorme peso de su cuenta bancaria y digamos no está pasando una de sus mejores rachas en cuanto a número de pacientes con ficha en su consulta... quizás los locos empiezen a estar cuerdos al no acudir, porque es obvio que no creo que haya menos ahora que antes.
Igor se siente contento, pero se trata de una felicidad con el alivio como su máximo exponente, al igual que cuando se despierta de esos extraños sueños en los cuales siempre son coincidentes la soledad y la falta de libertad. Aliviado al poder compartir con alguien esos sueños, aunque sepa que apenas le escuchan y que si lo hacen es para poder llevar el pan a casa. Él es consciente de ello y le da igual. Sólo paga para compartir sus sentimientos, aunque para su cuenta bancaria ese pago no significa mucho. Hoy Igor, de alguna manera, es feliz.
MIKEL, HOY
-Ring! Ring!- suena el teléfono.
-Voy, coño, voy – grita Mikel mientras se quita las legañas de los ojos.
Son las ocho de la mañana y Mikel vive sólo en un pequeño apartamento en las afueras de Bilbao. Desde su ventana ve el puerto y el azaroso trabajo de los pescadores desde primera hora de la mañana. Mikel proviene de una familia de pescadores, pero a él no le tira eso del pescado. Trabaja para una pequeña pero creciente empresa diseñadora de portales de internet, y ahora está diseñando una página para una conocida marca de automóviles. La está diseñando con gran empeño, disfruta haciéndolo.
-¿Sí?-
-Si, Mikel soy Marga.
-Ho ho hola Marga, ¿qué tal?- Mikel tartamudea un poco cuando se pone nervioso.
-Bien. Me preguntaba si querías quedar esta tarde pa tomar un café o no sé ir al cine o algo.
-Esta tarde?- Mikel sabe perfectamente que no tiene nada que hacer sin embargo vacila un poco a la hora de contestar. Consecuencia directa de su peculiar orgullo masculino.
-Si, a eso de las 6.-
-Bien vale, te paso a buscar, ok?-
-Te espero Mikel, un beso.-
-Agur Marga.-
Dios que contento que está, hacía tiempo que no le pedía salir una chorva, está orgulloso, se siente interesante. Desayunando, nunca le había parecido un donuts tan perfecto. Esponjoso, tan redondito, y lo bien que sabe al mojarlo en el café con leche... mmm exquisito. Aquel niki que la semana pasada no se ponía porque decía que le quedaba mal, hoy le sienta de perlas. No se besa en el espejo porque no llega. Lo fácil que es hacer feliz a los demás y lo poco que se hace. Debe ser cosa de la naturaleza humana.
Un bollo agujereado, leche y buen humor son los tres únicos acompañantes de Mikel en este momento. Deseoso de encarar una nueva jornada de trabajo, sale de su domicilio acompañanado de su inseparable powerbook en el cual lleva todo el proyecto de medio año. Abajo, en el garaje, le espera reluciente su escarabajo. La verdad es que Mikel es un hombre con mucho estilo.
CHARLI, ¿HOY?... SI, CREO QUE SI
Esta puta mañana después de esta bonita noche. Este delicioso extra-crema después de este jodido polvo. Este repelente despertador después de este bonito sueño. Este interminable minuto después de estas plácidas horas. Este bonito felpudo al lado de esta jodida alfombra. Estas putas paranoias después de este peaso siego.
Este es nuestro amigo Charli después de una noche de desenfreno. Charli es un cabrón listo y avispado, un vividor de la buena vida y un mangarrán desmoronado. Lo jodido es que vive bien, folla y tiene dinero. Esa mañana después del toque del jodido despertador, se levanta de mala leche, se viste y se va. En la cama deja 10.000 ptas y cierra con llave los cajones. Una mañana fría y bastante fea. Se marcha a trapichear algo por la ciudad, andando, como quien da un paseo por el parque tranquilamente. Acompañado de su Pittsburg no creo que tenga problemas...
- Charli! Que pasa tio que te cuentas?.
- Coño, Igor, cuanto tiempo, que pasa.
- Na, a ver si tenias algo de farla por ahí, que esta noche tenemos una fiestucki en casa Marga.
- Joño, pos justo me quedan tres gramos, si te hace...
- Okis, creo que será suficiente, ejjejej.-
- Toma pues, nos vemos.-
- Agur Charli, pasate si eso por allí.-
- A ver, igual me paso.-
- Venga pues!.-
Y cada uno prosigue su camino. Charli a vender algo más por ahí, dependiente de cuanta gente ande falta de recursos. Igor, a la uni, independientemente de nada ni de nadie.
MARGA, ESTA MISMA MAÑANA
Juerrrr que sueñooo...- Marga se levanta algo resacosa y sin ganas de mucho. Desayuna mientras echa una ojeada a la programación matutina. Afortunadamente dispone de televisión por satélite y de una de esas tarjetas piratas que te dejan ver todos los canales. Así, zappeando de uno a otro canal, pasa por el dial de cine X donde están echando “ Fue a por trabajo y le comieron lo de abajo “. Marga se pone algo cachonda y también siente que hace mucho que no le comen lo de abajo. Tras darle unas vueltas al bolo decide llamar a Mikel, porque ella sabe que también está solo, que seguramente estará harto de comer tanto espaghetti, y que lo más probable que quiera desviar su rutinaria dieta hacia esos animalillos de grandes dientes y orejas que siempre están comiendo zanahorias. Así, sin pensárselo un segundo, agarra el teléfono y le pega un toque ya con las braguitas algo húmedas. La conversación ya la sabéis...
Marga es una chica de 23 años estudiante. Comparte piso con Igor y con Elena. Ellos ya están en la uni. Ella como que pasaba un poco de ir a clase hoy, se ha levantado a las tantas. Es guapa, aunque a veces se siente fea, inteligente y bien dotada. Vamos, un buen partido. Sin embargo nunca se le han dado bien las relaciones estables de pareja.
Se lía un canuto de marihuana de la que tiene Igor en el pequeño invernadero instalado en su cuarto. En realidad lo toma prestado del armario donde guarda los cogollos que están secándose. Calada a calada va saboreando con el paladar lo que va aposentándose temporalmente en su linda cabezita. Cuando la chistarra reposa tranquilamente en el cenicero, ya se ha aposentado toda la esencia en su cabeza. Esta marihuana es la rehostia. El ciego se exterioriza con esos ojitos que solo ella sabe poner que te llaman a todo. Joder, que buena estás Marga.
Son las 2 de la tarde y Marga sigue en el sofá viendo videos musicales. Y sonríe.
UN DIA MAS PARA ELENA
Si tuvieramos que destacar una cualidad de Elena podríamos hacerlo simplemente compartiendo quince minutos con ella. La observación. Una mirada que inquieta, ojos vivos que regalan sentimientos allá por donde van. Elena es armonía, es dulzura, es darle mil vueltas a una frase, es hablar sin querer.
Elena convierte un desayuno en un regreso a la infancia, vierte ternura sobre la gente, duerme acompañada de su osito. Vive, sueña, sueña, vive. En constante transición entre sueño y realidad, una flor le basta para sentirse viva.
Elena es una chica rebelde pero responsable y consecuente con todo lo que hace. En muchos aspectos se parece a un tío. Siempre con pantacas anchos y camisetas ajustadas. Su colección de piercings parece el muestrario de la tienda donde se los hace. Cuatro en cada oreja, uno en la ceja, dos en la nariz, otro en la lengua y otro en el labio inferior, dos en ambos pezones y otro en el ombligo. Encima del coñito una bonita y discreta mariposa tatuada. Y la dulzura tomó forma.
w1r3d __--__--__--__ husmeando por la mirilla de los protas...
