El Grupo de Redes Ópticas del University College London ha conseguido establecer un nuevo récord en la transmisión de datos en condiciones de laboratorio. Han alcanzado una velocidad de 1,125 terabits por segundo, en el marco de
un estudio sobre la capacidad de los sistemas de transmisión óptica.
“Si bien los sistemas de transmisión óptica comerciales actuales son capaces de recibir tasas de datos de hasta 100 gigabits por segundo, en nuestro laboratorio estamos trabajando con un sofisticado equipo para diseñar los sistemas de redes de próxima generación y de comunicaciones que pueden administrar señales de datos a velocidades de más de 1 terabit por segundo”, dijo Robert Maher, líder del experimento.
"En comparación, nuestra velocidad es cerca de 50.000 veces más rápida que los 24 megas por segundo que promedia una conexión de banda ancha del Reino Unido, donde se define como superrápida. Para poner un ejemplo, la velocidad que hemos alcanzado nos permitiría descargar toda la serie
Juego de Tronos en un segundo",
añade.
Para lograr esta velocidad el equipo determinó la mejor manera de codificar la información en señales ópticas, teniendo en cuenta las limitaciones del transmisor y el receptor. Después aplicaron técnicas utilizadas normalmente en comunicaciones inalámbricas de codificación, pero que no se usan habitualmente en comunicaciones ópticas.
Además, se sirvieron de un sistema con un único receptor y la combinación de 15 canales de transmisión. Al agrupar los canales consiguieron un supercanal, camino que posiblemente en un futuro puedan seguir la próxima generación de sistemas de comunicación de alta capacidad.
En este estudio el equipo de investigadores conectó directamente el transmisor con el receptor para lograr la máxima velocidad de datos. El siguiente paso es probar el sistema y medir la velocidad en un escenario de transmisión de larga distancia, donde las señales ópticas pueden distorsionarse a medida que viajan a través de miles de kilómetros de fibra óptica.