Otra opción es, sencillamente, tratar de conectarte a XBOX Live con un juego reciente. Te intentará actualizar el dash, y listo.
Yo usé este método una vez que estropeé el exploit haciendo pruebas, y así te quedas con el dash original, como de fábrica (no modificas los archivos que tuvieses en el disco duro, pero la consola aparenta como de fábrica, y si esa es la condición que te han puesto...).