Hace tiempo que en la industria del videojuego se oyen voces de que el modelo de juegos AAA necesita cambios y Matthew Karch, director ejecutivo de Saber Interactive, se suma a esta corriente. En una entrevista a
GamesIndustry, Karch también ha defendido la reducción de costes desarrollando juegos en diferentes partes del mundo y sostiene que existe un espacio para vender títulos de calidad por debajo de los 70 u 80 euros (o 70 dólares).
Matthew Karch empieza afirmando que debido a los recortes y consolidación por la que está pasando la industria del videojuego estas navidades viviremos “una escasez de juegos”. El ejecutivo comenta que se pondrán a la venta menos juegos debido a que el sector se está contrayendo y el capital ha encontrado mejores sitios donde instalarse. En consecuencia, “la oferta de contenidos va a ser muy inferior a la demanda”, dice Karch. En su opinión, Saber Interactive prosperará gracias a las ventas de los juegos de catálogo, su capacidad de controlar gastos y el precio al que se venden los juegos, que para el ejecutivo es un factor vital.
“No hay motivos para vender un juego por 70 euros. Preferiría no hacerlo, me parece caro y no me gusta. Hasta diría que no es justo”, comenta Karch. “Parte del éxito de Helldivers II se debe a que tiene un precio mucho más bajo que lo hace accesible. Hace cinco años solo escuchabas hablar del próximo Assassin's Creed, Call of Duty, Battlefield… toda la industria esperaba con impaciencia esos grandes juegos. Pero ahora salen cosas como Palworld, Helldivers II y Valheim, que están arrasando. La gente se está dando cuenta de que existe la oportunidad de ofrecer un gran entretenimiento sin tener que asaltar la cuenta bancaria”.
A pesar de las críticas de Karch al coste de los juegos AAA, Warhammer 40.000 Space Marine II se venderá por 70 euros, un precio que pone el editor Focus Entertainment. El ejecutivo dice que este título es “muy superior” a cualquier cosa que Saber Interactive ha hecho hasta ahora, pero aun así comenta que le gustaría venderlo por menos de 70 euros, como mínimo en su edición digital.
Karch sostiene que el desarrollo de los juegos AAA está atrapado en un círculo vicioso y debe cambiar. Los juegos son cada vez más caros de hacer, así que las empresas cobran más por ellos. Esto significa que los títulos generan más ingresos y, si no lo consiguen, la empresa desarrolla menos juegos de este tipo. El ejecutivo añade que las suscripciones y otras formas de generar ingresos también han ejercido presión sobre el modelo tradicional.
¿Su remedio? Hacer juegos AAA en territorios donde no sea tan caro. “Puedo asegurarte que nuestro presupuesto para Master Chief Collection fue una vigésima parte de Halo Infinite, posiblemente una trigésima o una cuadragésima parte”, confiesa Karch. “Existe una forma de mantener los costes bajo control, hay que ser inteligente en la forma de desarrollar y entender que los juegos son una industria global. Hay gente en Buenos Aires, Serbia y Polonia que juegan a los mismos juegos que nosotros y que pueden hacerlos”. Saber Interactive tiene 3.500 empleados repartidos en 15 lugares de todo el mundo (como Madrid)
Gracias al control de gastos del que hace gala Matthew Karch, Saber Interactive desarrolló World War Z con un presupuesto de 12 millones de dólares y generó 15 veces esa cifra. Después la compañía lanzó Snowrunner y según el ejecutivo aún fue mejor. Karch afirma que su empresa recién separada de Embracer puede competir “con presupuestos que harían llorar a Electronic Arts o Take-Two”. El ejecutivo defiende que tienen el potencial “de cambiar la forma en la que se hacen los juegos” gracias a su capacidad de controlar los costes y crear productos de alta calidad”.