Puede que el CES sea la mayor feria del mundo dedicada a la tecnología de consumo, pero las novedades que presenta Samsung todos los años en la feria de Las Vegas son tan numerosas que obligan a la compañía a repartirlas en varios eventos distintos. Porque hay hueco para todo, pero lo contrario sería invitar al caos. Es por ello que su división de diseño y fabricación de pantallas, Samsung Display, ha decidido mostrar sus propios avances por separado, con propuestas que este año abarcan desde los móviles plegables a paneles QD-OLED de gran formato.
Tal vez el producto más destacable de esta edición sea el prototipo Flex Hybrid. Todavía sin muchos detalles oficiales, esta pantalla flexible destaca no solo por poder plegarse, sino porque se desliza hacia el exterior como el prototipo que
hace poco exhibió junto a Intel. Abierta, posee un tamaño de 10,5 pulgadas y una relación de aspecto de 4:3, que se convierten en 12,4 pulgadas y 16:10 cuando la mitad deslizable se estira hacia el exterior.
El prototipo Flex Slidable Duet, de mayor tamaño, se desliza hacia ambos lados. La pantalla Flex Hybrid de Samsung bien podría ser utilizada por móviles plegables con la capacidad de transformarse, ahora sí, en auténticos tablets hechos y derechos una vez abiertos.
Junto a este prototipo, Samsung Display también está exhibiendo en el CES una pantalla Flex Slidable Duet que se desliza hacia ambos lados, pudiendo crecer desde 13-14 pulgadas a 17,3 pulgadas. En este caso el diseño carece de bisagra y no parece doblarse por la mitad.
Finalmente, Samsung ha desvelado también una versión genérica del panel QD-OLED de 49 pulgadas utilizado por el nuevo
monitor gaming Odyssey OLED G9. Listo para su integración por otros fabricantes, proporciona resolución Quad-HD con curvatura 1800R. Todavía no se han anunciado productos basados en esta solución, pero sin duda compañías como Dell ya estarán valorando su integración.
Fuente: Samsung