Tres meses después de que saltaran las alarmas, Samsung
aún no sabe qué ha podido fallar en el Galaxy Note 7. La compañía surcoreana espera tener una respuesta dentro de poco, no obstante, según publica el diario local ETNews citando a un alto ejecutivo de la compañía. "Creemos que podremos anunciar las causas de la ignición que tuvo lugar en los Galaxy Note 7 a finales de este año", fueron sus palabras.
Samsung tiene motivos para dar a conocer la causa del fallo del Note 7 con la máxima celeridad posible, puesto que si retrasa aún más las explicaciones podrían coincidir con el debut del Galaxy S8 y enturbiar su imagen.
La retirada del mercado del Galaxy Note 7 no solo ha sido un
quebradero de cabeza para Samsung Electronics, sino también para Samsung SDI, su proveedor de baterías. La reputación de la compañía ha quedado gravemente dañada por este episodio, sembrando dudas entre sus clientes (Apple es probablemente el más importante de ellos) y espantando a otras empresas que podían haber estado interesadas en trabajar con el fabricante de baterías.
Afortunadamente para la compañía, los planes
para recuperar la confianza de los accionistas han surtido efecto. Durante los últimos dos días las acciones han subido como la espuma tras anunciar un aumento del dividendo y la consideración de algún tipo de estrategia para dividir Samsung Electronics en un
holding y una filial operativa, hasta el punto de que su valoración ha alcanzado máximos históricos.
Samsung deberá ahora tomar todas las medidas para evitar que se repita otro desastre como este, no sin descuidar el hecho de que buena parte de los Galaxy Note 7 que fueron comercializados todavía no ha sido recuperada por la compañía para su destrucción y reciclaje. Solo en Corea del Sur se estima que aún quedan 280.000 unidades por recuperar y que podrían poner en riesgo a sus usuarios.
Fuente: ETNews