Las consolas y juegos de Nintendo, junto con las cucarachas, son lo único que sobrevivirá a una hecatombe nuclear.
Mi GB tocho se me cayó por el balcón desde un primero y todavía sigue por aquí funcionando.
El Zelda LA de GB lo tiré por la ventana de un segundo porque se me borró la partida por segunda vez, me arrepentí, bajé a la calle, recogí las dos partes del cartucho y la pcb, fijé bien la pila y a volar.
También he visto esparramarse NES y SuperNES con iguales resultados.