@emerald golvellius Realmente no tiene nada de complicado, es lo que se ha hecho y hará, siempre y cuanto más avanza la industria es más común.
No siempre hay actores que pueden interpretar todas las variantes del trabajo, incluso, no siempre hay actores detrás de los personajes y se hacen a mano desde cero con sus animaciones y caras exclusivas, o se usa un actor para la captura de expresiones, voz y movimientos concretos, pero luego el personaje tiene otra cara, o se mezclan animaciones con captura de movimiento con animaciones creadas por el propio estudio.
Te recomiendo el documental Raising Kratos, es un buen ejemplo del proceso que lleva todo eso que dices, a parte de que es muy recomendable en general por todos los demás aspectos que conlleva crear un videojuego a todos los niveles.
En el caso de Senua si hay una actriz detrás que pone cara, voz, cuerpo y movimientos.
Y todo eso y a pesar de que no suene nada romántico se consigue con... Contratos.
Se contrata al actor o actriz para un desarrollo o por varios, según las cláusulas de este, o si pagan a un actor para que ponga cara y voz a un juego pero requiere que el personaje haga artes marciales y el actor en concreto no sabe, se contrata a un artista marcial para hacer esas capturas de movimiento concretas, o se hacen a mano sin que intervenga ningún actor.
Luego puede haber cláusulas concretas en las que se reserven el derecho de imagen para poder usarlo durante X títulos, publicidad, o que si el actor no pudiera estar en futuras entregas puedan usar las capturas que ya tienen para seguir construyendo al personaje, etc... Contratos y más contratos, dinero de por medio y a correr.
Lo que comentas de Darth Vader es diferente ya que el personaje no pertenece al actor, ningún personaje realmente pertenece al actor, pero en el caso de que lo intérprete otra persona el actor original no recibe ni merece nada realmente, los royalties son para el que posea los derechos de ese personaje, el dueño, básicamente.
El dinero que recibe el actor no siempre va ligado a que enseñe más o menos o cuánto de él ponga en el proyecto, según caché y condiciones.
Y básicamente así funciona, contratos, dinero y acuerdos. Los actores incluso pueden vender su imagen para que sea propiedad del estudio cada vez que hagan un juego nuevo y no necesariamente necesitarán a ese actor/actriz para futuros juegos porque ya tendrán su cara, expresiones y movimientos guardados y solo necesitarían actualizarlos o contratar a otra persona para que añada cosas nuevas, así de efímero es.