Pues es curioso, ya que en estos temas usan un doble rasero: te dicen que lo que compras no es el soporte físico (cd, dvd, vinilo...), sino una licencia de lo que hay en su interior. Claro, con eso derribas el argumento de "el disco lo he comprado yo y puedo hacer con él lo que me salga de los huevos: ripearlo, etc".
Sin embargo, si lo que has comprado es una licencia sobre el contenido... por qué te obligan a comprar la misma licencia otra vez si quieres escuchar la música en otro cd en el coche? Y si lo tenías ya comprado en vinilo, y luego lo compraste en cassette, y ahora lo has comprado en cd, y más adelante lo vas a comprar en dvd-audio... cuántas veces has pagado por la misma licencia? El haber pagado la licencia no debería darte derecho a recibir gratis (o quizás pagando una cantidad simbólica, lo que valga el soporte, o gratis si es por internet) el contenido licenciado?
Pues eso, las dos varas de medir de los timadores estos.