Signo Editores

Hola, por casualidad han caído en mis manos varios volúmenes de una colección de libros de Signo Editores, el caso es que me ha sorprendido la calidad de la obra y me gustaría saber un poco más de esta editorial y del resto de sus colecciones, este tipo de libros me entusiasma y nunca había oído hablar de Signo Editores.

Gracias de antemano.
SergiP escribió:Hola, por casualidad han caído en mis manos varios volúmenes de una colección de libros de Signo Editores, el caso es que me ha sorprendido la calidad de la obra y me gustaría saber un poco más de esta editorial y del resto de sus colecciones, este tipo de libros me entusiasma y nunca había oído hablar de Signo Editores.

Gracias de antemano.



Buenas noches, yo conozco a Ediciones del Signo, es una empresa de Buenos Aires, Argentina, pero que yo sepa no sólo está en el mercado de América.
En los tomos pone Signo Editores, con sede en Pozuelo de Alarcón en Madrid, no creo que sea la misma editorial, ¿qué tipo de libros tiene la que me comentas?
SergiP escribió:En los tomos pone Signo Editores, con sede en Pozuelo de Alarcón en Madrid, no creo que sea la misma editorial, ¿qué tipo de libros tiene la que me comentas?


Pues te mando una lista de título y autores, como verás hay de todo, en su web se encuentra su catálogo completo.


A propósito de La cuestión judía
Autor: Karl Marx

Acción e inercia social en el existencialismo
Autor: Augusto Pérez Lindo

Arte y estética en la encrucijada descolonial
Autor: Zulma Palermo (comp.)
[Ficha técnica]

Arte y naturaleza
Autor: Silvia Di Sanza

Cambios y continuidades
Autor: Marisa D’ Aquino; Roxana Contino

Campesinos en la ciudad
Autor: Julián Gallego

Canciones de verano y crepúsculos de invierno
Autor: Ricardo Galván Barquín

Capitalismo (disciplinario) de redes y cultura (global) del miedo
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Capitalismo y geopolítica del conocimiento
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Cinco memorias sobre la instrucción pública
Autor: Condorcet

Ciudad en el Mediterráneo Antiguo, La
Autor: Julián Gallego y Carlos G. García Mac Gaw

Color de la razón, El
Racismo epistemológico y razón imperial
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Condorcet
Instituir al ciudadano
Autor: Charles Coutel


Conservadores, progresistas y revolucionarios
Autor: Mónica Campins (comp.)

Crítica de la filosofía del derecho de Hegel
Autor: Karl Marx

Críticas de los derechos del hombre
Autor: Bertrand Binoche

Cuerpo del delito, El
La comunidad en deuda
Autor: Bernard Baas

Cuerpos, géneros e identidades
Autor: Omar Acha; Paula Halperin (comps

Culturas juveniles y rock
Autor: Miriam Patricia Alonso y otros

El camino del cisne
Autor: Enrique Meler

El legado de la ILUSTRACION
Autor: Enrique Meler

Elementos de lógica
Autor: Enrique Corti; Horacio Gianneschi

En busca de una identidad
Autor: Mercedes Giuffré

Ensayos sobre la verdad
Autor: Bertorello A. y otros

Escritos provisorios
Autor: Raúl Sciarretta

Espacialidad, Temporalidad y Comunicación-Red
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Espíritu y lógica del cristianismo
Autor: Martín Mazora

Estructuración de la subjetividad
Autor: Horacio Rotemberg

Estudios sobre el síntoma
Autor: Silvia Elena Tendlarz

Estudios sobre parentesco y Estado en el Antiguo Egipto
Autor: Marcelo Campagno (comp.)

Filosofía social y política de Hegel, La
Autor: Julio De Zan

Filosofía, Educación y Sociedad Global
Autor: M. Bernales Alvarado; M. Lobosco (comps.)


Finitud y mediación
Autor: Jorge Eduardo Fernández

Fragmentación social y desprotección de las personas
Autor: S.Severini; C. Teodori; E.Suárez; M.Gruschestsky

Fragmentos de la Modernidad
Autor: Jorge Velázquez Delgado
Octavio300 escribió:
SergiP escribió:En los tomos pone Signo Editores, con sede en Pozuelo de Alarcón en Madrid, no creo que sea la misma editorial, ¿qué tipo de libros tiene la que me comentas?


Pues te mando una lista de título y autores, como verás hay de todo, en su web se encuentra su catálogo completo.


A propósito de La cuestión judía
Autor: Karl Marx

Acción e inercia social en el existencialismo
Autor: Augusto Pérez Lindo

Arte y estética en la encrucijada descolonial
Autor: Zulma Palermo (comp.)
[Ficha técnica]

Arte y naturaleza
Autor: Silvia Di Sanza

Cambios y continuidades
Autor: Marisa D’ Aquino; Roxana Contino

Campesinos en la ciudad
Autor: Julián Gallego

Canciones de verano y crepúsculos de invierno
Autor: Ricardo Galván Barquín

Capitalismo (disciplinario) de redes y cultura (global) del miedo
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Capitalismo y geopolítica del conocimiento
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Cinco memorias sobre la instrucción pública
Autor: Condorcet

Ciudad en el Mediterráneo Antiguo, La
Autor: Julián Gallego y Carlos G. García Mac Gaw

Color de la razón, El
Racismo epistemológico y razón imperial
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Condorcet
Instituir al ciudadano
Autor: Charles Coutel


Conservadores, progresistas y revolucionarios
Autor: Mónica Campins (comp.)

Crítica de la filosofía del derecho de Hegel
Autor: Karl Marx

Críticas de los derechos del hombre
Autor: Bertrand Binoche

Cuerpo del delito, El
La comunidad en deuda
Autor: Bernard Baas

Cuerpos, géneros e identidades
Autor: Omar Acha; Paula Halperin (comps

Culturas juveniles y rock
Autor: Miriam Patricia Alonso y otros

El camino del cisne
Autor: Enrique Meler

El legado de la ILUSTRACION
Autor: Enrique Meler

Elementos de lógica
Autor: Enrique Corti; Horacio Gianneschi

En busca de una identidad
Autor: Mercedes Giuffré

Ensayos sobre la verdad
Autor: Bertorello A. y otros

Escritos provisorios
Autor: Raúl Sciarretta

Espacialidad, Temporalidad y Comunicación-Red
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Espíritu y lógica del cristianismo
Autor: Martín Mazora

Estructuración de la subjetividad
Autor: Horacio Rotemberg

Estudios sobre el síntoma
Autor: Silvia Elena Tendlarz

Estudios sobre parentesco y Estado en el Antiguo Egipto
Autor: Marcelo Campagno (comp.)

Filosofía social y política de Hegel, La
Autor: Julio De Zan

Filosofía, Educación y Sociedad Global
Autor: M. Bernales Alvarado; M. Lobosco (comps.)


Finitud y mediación
Autor: Jorge Eduardo Fernández

Fragmentación social y desprotección de las personas
Autor: S.Severini; C. Teodori; E.Suárez; M.Gruschestsky

Fragmentos de la Modernidad
Autor: Jorge Velázquez Delgado



Creo que no va a tener nada que ver, pero de todas formas, ¿me puedes mandar la dirección?
La dirección es esta:
http://www.edicionesdelsigno.com.ar/

Por cierto, te recomiendo que leas “Teoría del contratiempo implosivo”, de la Ediciones del Signo, si te gusta este tipo de temas es de lo mejor que puedes encontrar, te envío la sinopsis para que te hagas una idea, la he localizado en una web de filosofía, es un poco extenso pero si te anima a leer el libro merece la pena.


ALBIZU, Edgardo: Teoría del contratiempo implosivo. Ediciones del Signo, Buenos Aires, 2006, 526 pp.
“Existir es actuar el tiempo que se padece” E. Albizu, p. 141.
Esta obra es una historia de las esencias reales, de su retroversión, de su descenso en el contratiempo; en otros términos: una fenomenología de nuestra época, una reflexión sobre nuestro presente como terminación y giro. Tres conceptos contribuyen a la comprensión de la obra: Idea, como totalidad operante; alienación; época, como nexo transformado de la idea (tiempo) e historia, es decir, el contratiempo mismo.
La historia interna de la elaboración de esta obra recuerda que llevaba por título original el siguiente: Alienación: génesis de una idea, estructura de una época. La primera parte del título remite a la historia conceptual y la segunda, la estructura de la época, al destino de las esencias reales. En otros términos la pregunta central que trata de responder Edgardo Albizu es la siguiente, ¿Cómo reconstruir la historia conceptual de una época desde la filosofía? Los conceptos operativos de alienación e ideología se presentan, pues, como puntas de lanza para penetrar en el misterio de nuestro tiempo.
Alienación se piensa, en la I Parte de la obra, desde sus diversos registros lexicográficos (jurídico, teológico-místico, económico social) hasta su dimensión metafísica (la alienación de la Idea, que es Tiempo, en el contratiempo, que es Historia). Recordemos que Albizu señala que el marco teórico de su investigación es la metafísica (p. 61) y que los constructos metafísicos se encuentran presente a pesar de los diversos torquemadas analíticos que los satanizan, paseándose por las calles, frecuentando restaurantes y visitando lupanares (p. 232). ¿Qué es la metafísica? se preguntarán retórica y desdeñosamente estos últimos. El doctor Albizu no duda es definirla como la confusión de Tiempo y contratiempo. En otros términos, se trata del problema central, señalado por el Marx doctorando de 1839, de la conversión de la filosofía en mundo.
En esta conversión, ideología es el otro concepto estudiado en la I Parte. Nuevamente aquí se revisan los diversos registros lexicográficos del término para presentar el aporte del autor. Así, se define a la ideología como un sistema permutante de significaciones (ciencia y filosofía, razón y voluntad, teoría y praxis). Se trata del poder de la razón al servicio del poder. Y la historia conceptual de nuestra época, en esta Parte I, es la de la reducción ideológica de las esencia reales: Dios queda reducido a información; el alma a inversión y lucro; el mundo a desarrollo, y la verdad a consenso o mera charla. Y, podríamos agregar, el Dr. Albizu hace al final de la obra también la reducción de las notas del existir humano, descubiertas por Heidegger: encontrabilidad, reducida al mero “pasarla bien”; comprensión del ser a “crecimiento económico” y el habla a “charla”.
En la Parte I, entonces, se reconocen dos momentos nucleares en la historia del pensar de Edgardo Albizu:
1. El descubrimiento de que tiempo no significa pasaje, mudanza, extinción, destrucción, sino génesis, creación, triunfo.
2. El descubrimiento de la consistencia de la conciencia como unidad de sistemas de significancia, normales y permutantes.
En la Parte II se presentan los momentos en los que el concepto Dios se constituye en centro de la filosofía moderna. Y en forma particular el argumento ontológico como punto culminante de la razón y como principio de la muerte de Dios. La pregunta por Dios, señala el autor, remite a la doble pregunta por mi cuerpo-su cuerpo, mi conciencia-su conciencia. Las dimensiones de la muerte de Dios, como flancos de la ideología, constituyen campos aún inexplorados para el pensar, subraya Albizu, señalando la tierra futura del pensar.
Las preguntas directrices de la Parte II son, pues, las siguientes: ¿quién es Dios?, ¿quién es yo?, ¿qué es mi cuerpo? Y responde Albizu: Dios es aquello que en mí es lo más interior, el centro del alma, la chispa divina. Y en la conclusión de la obra nos revelará: se trata de Tiempo. Comienzo de la solución del misterio de la historia (como la caracterizó Marx): la historia, en cuanto metamorfosis de la eternidad, o del presente racional, es el argumento ontológico propiamente dicho: el sistema de la infinita mediación ser-concepto. De modo tal que en la Parte I está Dios siéndose (p. 199). Queda presentada, entonces, en esta Parte II la estructura triangular de Dios como gozo, servicio y gobierno.
En la Parte III, Mundo y alma sin futuro, se expone la tesis fuerte: la relación íntima entre mi cuerpo y el cuerpo de Dios. Y la muerte de Dios, anunciada como liberación por la razón moderna, no devuelve existencia sino que, por el contrario, arrastra nuestra existencia hacia la muerte. Las esencias reales mundo y alma resultan mediación de Dios y en su implosión el mundo (ordo-kosmos) acaece como desarrollo; el alma (equilibrio nacido del orden y la armonía) implota en la ascética desublimación y la verdad se torna opinión infinita.
El recurso a Hegel aquí planteado, remarca el Dr. Albizu, no significa reiteración, sino pre-instauración de la plenitud de la época, en tanto alienación. Recordemos que Época es el nexo transformado de la idea (tiempo) en el contra-tiempo (historia). En la implosión de las esencias reales en la alienación luce la idea de época como nexo transformado de la idea (Tiempo) en historia (contratiempo). La Época es historia porque instaura una diferencia entre Pt1 y Pt2 1. El Pt2 es tiempo desaparecido; el Pt1 es, así, pseudo originario; es el Pt1 de la cuádruple dispersión del tiempo que desaparece (muerte de Dios; eros desublimado y ascético; desarrollo infinito y opinión infinita). Así, lo expuesto en esta obra y en particular en la III Parte, integra la gran experiencia del mal. Y podemos pensar entonces a Teoría del contratiempo implosivo como la obra que consolide una nueva especie historiográfica: la de la historia del mal. Y el mal, núcleo contratemporal implosivo, irradia sus figuras que fijarán las épocas contratemporales de implosión:
1. El genio maligno
2. Mefistófeles
3. El diablo lascivo de burdel
4. El ángel venenoso Sammael, que proclama como última liberación: la llave de tu libertad es tu triste, dolorosa muerte.
Las distintas metamorfosis del genio maligno contienen las claves de la gesta contratemporal del mundo y alma, ergon y eros. Y a las figuras propuestas por el Dr. Albizu correspondería agregar la de los sujetos históricos que consumaron contratemporalmente una época de la alienación para inaugurar la siguiente: el Marqués Gilles de Rais (siglos XIV-XV); el Marqués de Sade (siglos XVIII-XIX) y Aleister Crowley (siglos XX-XXI).
La verdad y su implosión como opinión infinita, remite a un ensayo de crítica de la epistemología que Albizu presenta en la IV Parte. La revisión de las principales corrientes de la filosofía de la ciencia, desde el neo-positivismo hasta la versión sofistica es consistente puesto que, recordemos, el programa ideológico originalmente planteado por Destutt de Tracy contenía en sí el germen de la epistemología. Esta es, así, un flanco de la ideología, entendida ahora como sistema permutante de significancia2. Y una de las obsesiones desde el neopositivismo (con antecedentes en Marx, desde luego) hasta Popper fue la búsqueda de un criterio de demarcación entre ciencia y filosofía. Aquí el Dr. Albizu nos brinda su propio y magistral criterio: lo poco que se sabe es filosofía, el resto es ciencia (p. 392).
Filosofía y ciencia aparecen, entonces, como espolones del Tiempo contra los que embate el contra-tiempo. Y la ideología se presenta como el descenso de la Idea, su caída, la atomización de la in-significancia de la Idea, en tanto verdad del circuito. Pero la conciencia alienada sólo opina y opina, ante lo cual, advierte Albizu en líneas en las que resuena la poesía metafísica de Francisco Luis Bernardez, sólo cabe oponer el silencio, como único remedio ante el mal de la opinión infinita.
La muerte de Dios es la muerte de mi existencia como apertura al futuro. La muerte del alma es el Pt1 sin Pt1 (Presente primario sin Presente primario); la muerte del mundo es el P sin P(Pasado sin Pasado) y la muerte de la verdad el Pt2 sin Pt2 (Presente secundario sin Presente secundario). Entonces: sin verdad las esencias reales se introdisuelven y sólo quedan esencias derivadas, que son los tipos ideales de la conciencia alienada.
Y en la opinión infinita, la conciencia alienada, nada aprende del tiempo. Se trata, ahora, del fenómeno del des-tiempo en el contra-tiempo. El Tiempo mismo (la insignificancia) al perderse para el consciente estar siendo pierde la negatividad (el prefijo in) que mantiene a la conciencia en la existencia y el tiempo se pierde, así, irremediablemente en el marasmo de la opinión infinita.
El Tiempo es inherente al estar siendo. El Tiempo se gesta en mí: es la cumbre de la montaña. Y si la mística piensa a Dios como centro del alma (lo otro de mí en mí) la filosofía lo interroga, ahora, como Tiempo.
Finalmente, la conciencia alienada se pregunta ante estas reflexiones, ¿qué hacer?, pregunta mal planteada, abstracta y pretenciosa. Y el Dr. Albizu afirma que cada uno de nosotros ha de responder, ha de aposentar la interrogación ¿qué hago de mí mismo absorbido por la implosión de las esencias reales? No dispersarme en el exterior: esta es la respuesta trans-ética que propone Albizu: estar en mi en y como el límite de la idea, irme con la idea. Hacer de cada uno un habitante del espacio-tiempo (según lo permita la desaparición de la idea en la naturaleza); un jugador de la razón (según lo permite el límite del retroceso de la idea hacia su origen); finalmente un guerrero del Tiempo primordial (F2: Futuro secundario), según lo permita el límite de la implosión de la idea hacia sus orígenes metafísicos: hacia las esencias reales.
Alma, mundo, Dios, verdad: cuatro ideas, pues, que permiten al Dr. Albizu pensar la configuración de nuestro mundo como descenso. Cuatro ideas que sufren las consecuencias de este doble movimiento de ascenso y descenso y aparecen en la forma de desublimación de eros, desarrollo, muerte de Dios y opinión infinita: esta es la estructura básica de este presente definido por este vértice histórico. Alma, mundo, Dios, verdad, se tornan momentos de este mismo mundo. En el comienzo de la cultura occidental el mundo fue concebido como templo, lugar en el que participan tanto el hombre como Dios. Durante los siglos XV al XVIII el mundo se va transformando en teatro, admirable máquina que supone un genio sabio (Leibnitz, Newton, el teatro barroco). En el siglo XVIII el mundo comienza a ser concebido como un mercado, en donde todo se compra, aún el placer (Smith, Kant y Marx). El mundo del siglo XX es el de la cárcel cibernética, consecuencia final del desarrollo y de la opinión infinita. Un mundo ya sin verdad pero con control. Y para no perdernos a nosotros mismos en el marasmo de la triste época que nos ha tocado actuar, el Dr. Albizu nos ha proporcionado una magnífica cartografía que retoma los núcleos teóricos y estéticos de la filosofía, rechazando y denunciando los vértices alienogénicos de la ética y de la ideología.
Octavio300 escribió:La dirección es esta:
http://www.edicionesdelsigno.com.ar/

Por cierto, te recomiendo que leas “Teoría del contratiempo implosivo”, de la Ediciones del Signo, si te gusta este tipo de temas es de lo mejor que puedes encontrar, te envío la sinopsis para que te hagas una idea, la he localizado en una web de filosofía, es un poco extenso pero si te anima a leer el libro merece la pena.


ALBIZU, Edgardo: Teoría del contratiempo implosivo. Ediciones del Signo, Buenos Aires, 2006, 526 pp.
“Existir es actuar el tiempo que se padece” E. Albizu, p. 141.
Esta obra es una historia de las esencias reales, de su retroversión, de su descenso en el contratiempo; en otros términos: una fenomenología de nuestra época, una reflexión sobre nuestro presente como terminación y giro. Tres conceptos contribuyen a la comprensión de la obra: Idea, como totalidad operante; alienación; época, como nexo transformado de la idea (tiempo) e historia, es decir, el contratiempo mismo.
La historia interna de la elaboración de esta obra recuerda que llevaba por título original el siguiente: Alienación: génesis de una idea, estructura de una época. La primera parte del título remite a la historia conceptual y la segunda, la estructura de la época, al destino de las esencias reales. En otros términos la pregunta central que trata de responder Edgardo Albizu es la siguiente, ¿Cómo reconstruir la historia conceptual de una época desde la filosofía? Los conceptos operativos de alienación e ideología se presentan, pues, como puntas de lanza para penetrar en el misterio de nuestro tiempo.
Alienación se piensa, en la I Parte de la obra, desde sus diversos registros lexicográficos (jurídico, teológico-místico, económico social) hasta su dimensión metafísica (la alienación de la Idea, que es Tiempo, en el contratiempo, que es Historia). Recordemos que Albizu señala que el marco teórico de su investigación es la metafísica (p. 61) y que los constructos metafísicos se encuentran presente a pesar de los diversos torquemadas analíticos que los satanizan, paseándose por las calles, frecuentando restaurantes y visitando lupanares (p. 232). ¿Qué es la metafísica? se preguntarán retórica y desdeñosamente estos últimos. El doctor Albizu no duda es definirla como la confusión de Tiempo y contratiempo. En otros términos, se trata del problema central, señalado por el Marx doctorando de 1839, de la conversión de la filosofía en mundo.
En esta conversión, ideología es el otro concepto estudiado en la I Parte. Nuevamente aquí se revisan los diversos registros lexicográficos del término para presentar el aporte del autor. Así, se define a la ideología como un sistema permutante de significaciones (ciencia y filosofía, razón y voluntad, teoría y praxis). Se trata del poder de la razón al servicio del poder. Y la historia conceptual de nuestra época, en esta Parte I, es la de la reducción ideológica de las esencia reales: Dios queda reducido a información; el alma a inversión y lucro; el mundo a desarrollo, y la verdad a consenso o mera charla. Y, podríamos agregar, el Dr. Albizu hace al final de la obra también la reducción de las notas del existir humano, descubiertas por Heidegger: encontrabilidad, reducida al mero “pasarla bien”; comprensión del ser a “crecimiento económico” y el habla a “charla”.
En la Parte I, entonces, se reconocen dos momentos nucleares en la historia del pensar de Edgardo Albizu:
1. El descubrimiento de que tiempo no significa pasaje, mudanza, extinción, destrucción, sino génesis, creación, triunfo.
2. El descubrimiento de la consistencia de la conciencia como unidad de sistemas de significancia, normales y permutantes.
En la Parte II se presentan los momentos en los que el concepto Dios se constituye en centro de la filosofía moderna. Y en forma particular el argumento ontológico como punto culminante de la razón y como principio de la muerte de Dios. La pregunta por Dios, señala el autor, remite a la doble pregunta por mi cuerpo-su cuerpo, mi conciencia-su conciencia. Las dimensiones de la muerte de Dios, como flancos de la ideología, constituyen campos aún inexplorados para el pensar, subraya Albizu, señalando la tierra futura del pensar.
Las preguntas directrices de la Parte II son, pues, las siguientes: ¿quién es Dios?, ¿quién es yo?, ¿qué es mi cuerpo? Y responde Albizu: Dios es aquello que en mí es lo más interior, el centro del alma, la chispa divina. Y en la conclusión de la obra nos revelará: se trata de Tiempo. Comienzo de la solución del misterio de la historia (como la caracterizó Marx): la historia, en cuanto metamorfosis de la eternidad, o del presente racional, es el argumento ontológico propiamente dicho: el sistema de la infinita mediación ser-concepto. De modo tal que en la Parte I está Dios siéndose (p. 199). Queda presentada, entonces, en esta Parte II la estructura triangular de Dios como gozo, servicio y gobierno.
En la Parte III, Mundo y alma sin futuro, se expone la tesis fuerte: la relación íntima entre mi cuerpo y el cuerpo de Dios. Y la muerte de Dios, anunciada como liberación por la razón moderna, no devuelve existencia sino que, por el contrario, arrastra nuestra existencia hacia la muerte. Las esencias reales mundo y alma resultan mediación de Dios y en su implosión el mundo (ordo-kosmos) acaece como desarrollo; el alma (equilibrio nacido del orden y la armonía) implota en la ascética desublimación y la verdad se torna opinión infinita.
El recurso a Hegel aquí planteado, remarca el Dr. Albizu, no significa reiteración, sino pre-instauración de la plenitud de la época, en tanto alienación. Recordemos que Época es el nexo transformado de la idea (tiempo) en el contra-tiempo (historia). En la implosión de las esencias reales en la alienación luce la idea de época como nexo transformado de la idea (Tiempo) en historia (contratiempo). La Época es historia porque instaura una diferencia entre Pt1 y Pt2 1. El Pt2 es tiempo desaparecido; el Pt1 es, así, pseudo originario; es el Pt1 de la cuádruple dispersión del tiempo que desaparece (muerte de Dios; eros desublimado y ascético; desarrollo infinito y opinión infinita). Así, lo expuesto en esta obra y en particular en la III Parte, integra la gran experiencia del mal. Y podemos pensar entonces a Teoría del contratiempo implosivo como la obra que consolide una nueva especie historiográfica: la de la historia del mal. Y el mal, núcleo contratemporal implosivo, irradia sus figuras que fijarán las épocas contratemporales de implosión:
1. El genio maligno
2. Mefistófeles
3. El diablo lascivo de burdel
4. El ángel venenoso Sammael, que proclama como última liberación: la llave de tu libertad es tu triste, dolorosa muerte.
Las distintas metamorfosis del genio maligno contienen las claves de la gesta contratemporal del mundo y alma, ergon y eros. Y a las figuras propuestas por el Dr. Albizu correspondería agregar la de los sujetos históricos que consumaron contratemporalmente una época de la alienación para inaugurar la siguiente: el Marqués Gilles de Rais (siglos XIV-XV); el Marqués de Sade (siglos XVIII-XIX) y Aleister Crowley (siglos XX-XXI).
La verdad y su implosión como opinión infinita, remite a un ensayo de crítica de la epistemología que Albizu presenta en la IV Parte. La revisión de las principales corrientes de la filosofía de la ciencia, desde el neo-positivismo hasta la versión sofistica es consistente puesto que, recordemos, el programa ideológico originalmente planteado por Destutt de Tracy contenía en sí el germen de la epistemología. Esta es, así, un flanco de la ideología, entendida ahora como sistema permutante de significancia2. Y una de las obsesiones desde el neopositivismo (con antecedentes en Marx, desde luego) hasta Popper fue la búsqueda de un criterio de demarcación entre ciencia y filosofía. Aquí el Dr. Albizu nos brinda su propio y magistral criterio: lo poco que se sabe es filosofía, el resto es ciencia (p. 392).
Filosofía y ciencia aparecen, entonces, como espolones del Tiempo contra los que embate el contra-tiempo. Y la ideología se presenta como el descenso de la Idea, su caída, la atomización de la in-significancia de la Idea, en tanto verdad del circuito. Pero la conciencia alienada sólo opina y opina, ante lo cual, advierte Albizu en líneas en las que resuena la poesía metafísica de Francisco Luis Bernardez, sólo cabe oponer el silencio, como único remedio ante el mal de la opinión infinita.
La muerte de Dios es la muerte de mi existencia como apertura al futuro. La muerte del alma es el Pt1 sin Pt1 (Presente primario sin Presente primario); la muerte del mundo es el P sin P(Pasado sin Pasado) y la muerte de la verdad el Pt2 sin Pt2 (Presente secundario sin Presente secundario). Entonces: sin verdad las esencias reales se introdisuelven y sólo quedan esencias derivadas, que son los tipos ideales de la conciencia alienada.
Y en la opinión infinita, la conciencia alienada, nada aprende del tiempo. Se trata, ahora, del fenómeno del des-tiempo en el contra-tiempo. El Tiempo mismo (la insignificancia) al perderse para el consciente estar siendo pierde la negatividad (el prefijo in) que mantiene a la conciencia en la existencia y el tiempo se pierde, así, irremediablemente en el marasmo de la opinión infinita.
El Tiempo es inherente al estar siendo. El Tiempo se gesta en mí: es la cumbre de la montaña. Y si la mística piensa a Dios como centro del alma (lo otro de mí en mí) la filosofía lo interroga, ahora, como Tiempo.
Finalmente, la conciencia alienada se pregunta ante estas reflexiones, ¿qué hacer?, pregunta mal planteada, abstracta y pretenciosa. Y el Dr. Albizu afirma que cada uno de nosotros ha de responder, ha de aposentar la interrogación ¿qué hago de mí mismo absorbido por la implosión de las esencias reales? No dispersarme en el exterior: esta es la respuesta trans-ética que propone Albizu: estar en mi en y como el límite de la idea, irme con la idea. Hacer de cada uno un habitante del espacio-tiempo (según lo permita la desaparición de la idea en la naturaleza); un jugador de la razón (según lo permite el límite del retroceso de la idea hacia su origen); finalmente un guerrero del Tiempo primordial (F2: Futuro secundario), según lo permita el límite de la implosión de la idea hacia sus orígenes metafísicos: hacia las esencias reales.
Alma, mundo, Dios, verdad: cuatro ideas, pues, que permiten al Dr. Albizu pensar la configuración de nuestro mundo como descenso. Cuatro ideas que sufren las consecuencias de este doble movimiento de ascenso y descenso y aparecen en la forma de desublimación de eros, desarrollo, muerte de Dios y opinión infinita: esta es la estructura básica de este presente definido por este vértice histórico. Alma, mundo, Dios, verdad, se tornan momentos de este mismo mundo. En el comienzo de la cultura occidental el mundo fue concebido como templo, lugar en el que participan tanto el hombre como Dios. Durante los siglos XV al XVIII el mundo se va transformando en teatro, admirable máquina que supone un genio sabio (Leibnitz, Newton, el teatro barroco). En el siglo XVIII el mundo comienza a ser concebido como un mercado, en donde todo se compra, aún el placer (Smith, Kant y Marx). El mundo del siglo XX es el de la cárcel cibernética, consecuencia final del desarrollo y de la opinión infinita. Un mundo ya sin verdad pero con control. Y para no perdernos a nosotros mismos en el marasmo de la triste época que nos ha tocado actuar, el Dr. Albizu nos ha proporcionado una magnífica cartografía que retoma los núcleos teóricos y estéticos de la filosofía, rechazando y denunciando los vértices alienogénicos de la ética y de la ideología.



La filosofía es un tema en el que siempre me he querido profundizar, pero no he ido más allá de Historia de la filosofía de Copleston.
Entonces quizás se te haga un poco pesado la Teoría del contratiempo implosivo, te recomiendo algo más básico como Diálogos Socráticos de Platón.
Octavio300 escribió:Entonces quizás se te haga un poco pesado la Teoría del contratiempo implosivo, te recomiendo algo más básico como Diálogos Socráticos de Platón.


¿Qué libro te estás leyendo ahora?
Pues hoy me he comprado Mil rosas grises, de Evelio Pedrajas.¿y tú?
Octavio300 escribió:Pues hoy me he comprado Mil rosas grises, de Evelio Pedrajas.¿y tú?


Pues me acabo de empezar “El nombre de la rosa”, de Umberto Eco, ya ves, un libro que no acaba de salir precisamente, pero es que no me lo había leído todavía , y como el film me gustó mucho …
Buen libro, incluso buena película, por supuesto no es comprable pero bueno.

En general estoy bastante en contra de ver las películas de los libros que se llevan al cine.
Octavio300 escribió:Buen libro, incluso buena película, por supuesto no es comprable pero bueno.

En general estoy bastante en contra de ver las películas de los libros que se llevan al cine.



Yo también, que conste, prácticamente siempre salgo decepcionado cuando voy a ver al cine alguna adaptación
Ten en cuenta que no tiene que ser nada fácil, lo primero que una película no puede durar más de tres horas aproximadamente, por lo menos si quieres que la va alguien, luego es que haya cuando el autor de un libro empieza a describirte con detalle una situación, una escena, un paisaje muchas veces lo bonito es eso, en el cine sin embargo te muestran una imagen y con eso tienen todo hecho, la impresión es totalmente distinta.
Octavio300 escribió:
SergiP escribió:En los tomos pone Signo Editores, con sede en Pozuelo de Alarcón en Madrid, no creo que sea la misma editorial, ¿qué tipo de libros tiene la que me comentas?


Pues te mando una lista de título y autores, como verás hay de todo, en su web se encuentra su catálogo completo.


A propósito de La cuestión judía
Autor: Karl Marx

Acción e inercia social en el existencialismo
Autor: Augusto Pérez Lindo

Arte y estética en la encrucijada descolonial
Autor: Zulma Palermo (comp.)
[Ficha técnica]

Arte y naturaleza
Autor: Silvia Di Sanza

Cambios y continuidades
Autor: Marisa D’ Aquino; Roxana Contino

Campesinos en la ciudad
Autor: Julián Gallego

Canciones de verano y crepúsculos de invierno
Autor: Ricardo Galván Barquín

Capitalismo (disciplinario) de redes y cultura (global) del miedo
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Capitalismo y geopolítica del conocimiento
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Cinco memorias sobre la instrucción pública
Autor: Condorcet

Ciudad en el Mediterráneo Antiguo, La
Autor: Julián Gallego y Carlos G. García Mac Gaw

Color de la razón, El
Racismo epistemológico y razón imperial
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Condorcet
Instituir al ciudadano
Autor: Charles Coutel


Conservadores, progresistas y revolucionarios
Autor: Mónica Campins (comp.)

Crítica de la filosofía del derecho de Hegel
Autor: Karl Marx

Críticas de los derechos del hombre
Autor: Bertrand Binoche

Cuerpo del delito, El
La comunidad en deuda
Autor: Bernard Baas

Cuerpos, géneros e identidades
Autor: Omar Acha; Paula Halperin (comps

Culturas juveniles y rock
Autor: Miriam Patricia Alonso y otros

El camino del cisne
Autor: Enrique Meler

El legado de la ILUSTRACION
Autor: Enrique Meler

Elementos de lógica
Autor: Enrique Corti; Horacio Gianneschi

En busca de una identidad
Autor: Mercedes Giuffré

Ensayos sobre la verdad
Autor: Bertorello A. y otros

Escritos provisorios
Autor: Raúl Sciarretta

Espacialidad, Temporalidad y Comunicación-Red
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Espíritu y lógica del cristianismo
Autor: Martín Mazora

Estructuración de la subjetividad
Autor: Horacio Rotemberg

Estudios sobre el síntoma
Autor: Silvia Elena Tendlarz

Estudios sobre parentesco y Estado en el Antiguo Egipto
Autor: Marcelo Campagno (comp.)

Filosofía social y política de Hegel, La
Autor: Julio De Zan

Filosofía, Educación y Sociedad Global
Autor: M. Bernales Alvarado; M. Lobosco (comps.)


Finitud y mediación
Autor: Jorge Eduardo Fernández

Fragmentación social y desprotección de las personas
Autor: S.Severini; C. Teodori; E.Suárez; M.Gruschestsky

Fragmentos de la Modernidad
Autor: Jorge Velázquez Delgado



Estoy de acuerdo contigo, muchas veces lo mejor para no decepcionarte es no leer el libro si ya has visto la película.


Por cierto, de esta lista que has puesto, ¿has leído el último, Fragmentos de la Modernidad?
SergiP escribió:
Octavio300 escribió:
SergiP escribió:En los tomos pone Signo Editores, con sede en Pozuelo de Alarcón en Madrid, no creo que sea la misma editorial, ¿qué tipo de libros tiene la que me comentas?


Pues te mando una lista de título y autores, como verás hay de todo, en su web se encuentra su catálogo completo.


A propósito de La cuestión judía
Autor: Karl Marx

Acción e inercia social en el existencialismo
Autor: Augusto Pérez Lindo

Arte y estética en la encrucijada descolonial
Autor: Zulma Palermo (comp.)
[Ficha técnica]

Arte y naturaleza
Autor: Silvia Di Sanza

Cambios y continuidades
Autor: Marisa D’ Aquino; Roxana Contino

Campesinos en la ciudad
Autor: Julián Gallego

Canciones de verano y crepúsculos de invierno
Autor: Ricardo Galván Barquín

Capitalismo (disciplinario) de redes y cultura (global) del miedo
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Capitalismo y geopolítica del conocimiento
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Cinco memorias sobre la instrucción pública
Autor: Condorcet

Ciudad en el Mediterráneo Antiguo, La
Autor: Julián Gallego y Carlos G. García Mac Gaw

Color de la razón, El
Racismo epistemológico y razón imperial
Autor: Walter Mignolo (comp.)

Condorcet
Instituir al ciudadano
Autor: Charles Coutel


Conservadores, progresistas y revolucionarios
Autor: Mónica Campins (comp.)

Crítica de la filosofía del derecho de Hegel
Autor: Karl Marx

Críticas de los derechos del hombre
Autor: Bertrand Binoche

Cuerpo del delito, El
La comunidad en deuda
Autor: Bernard Baas

Cuerpos, géneros e identidades
Autor: Omar Acha; Paula Halperin (comps

Culturas juveniles y rock
Autor: Miriam Patricia Alonso y otros

El camino del cisne
Autor: Enrique Meler

El legado de la ILUSTRACION
Autor: Enrique Meler

Elementos de lógica
Autor: Enrique Corti; Horacio Gianneschi

En busca de una identidad
Autor: Mercedes Giuffré

Ensayos sobre la verdad
Autor: Bertorello A. y otros

Escritos provisorios
Autor: Raúl Sciarretta

Espacialidad, Temporalidad y Comunicación-Red
Autor: Rafael Vidal Jiménez

Espíritu y lógica del cristianismo
Autor: Martín Mazora

Estructuración de la subjetividad
Autor: Horacio Rotemberg

Estudios sobre el síntoma
Autor: Silvia Elena Tendlarz

Estudios sobre parentesco y Estado en el Antiguo Egipto
Autor: Marcelo Campagno (comp.)

Filosofía social y política de Hegel, La
Autor: Julio De Zan

Filosofía, Educación y Sociedad Global
Autor: M. Bernales Alvarado; M. Lobosco (comps.)


Finitud y mediación
Autor: Jorge Eduardo Fernández

Fragmentación social y desprotección de las personas
Autor: S.Severini; C. Teodori; E.Suárez; M.Gruschestsky

Fragmentos de la Modernidad
Autor: Jorge Velázquez Delgado



Estoy de acuerdo contigo, muchas veces lo mejor para no decepcionarte es no leer el libro si ya has visto la película.


Por cierto, de esta lista que has puesto, ¿has leído el último, Fragmentos de la Modernidad?



Pues no, la verdad es que no, ¿por qué?
Pues no, la verdad es que no, ¿por qué?[/quote]


Porque me han hablado bastante bien de él.Bueno, va siendo hora de dormir, encantado.
SergiP escribió:Hola, por casualidad han caído en mis manos varios volúmenes de una colección de libros de Signo Editores, el caso es que me ha sorprendido la calidad de la obra y me gustaría saber un poco más de esta editorial y del resto de sus colecciones, este tipo de libros me entusiasma y nunca había oído hablar de Signo Editores.

Gracias de antemano.


Signo Editores no tiene nada que ver con Ediciones del Signo, mirar estas webs que he encontrado:

Signo Editores
Ediciones del Signo
17 respuestas