Hablo y me pongo nervioso, me encanta esa sensación. Adrenalina en parado. Dos personas dopadas por naturaleza. Miedo a todo sin importar nada. Todo debe ser perfecto y a medida de que lo es te das cuenta. Todo cuadra. Piensas que algo va mal, algo no encaja, aquí ni sobran ni faltan piezas, no sabes como hacer un puzzle perfecto. Piensas: No es mío, es robado...
Una mirada, vuelves a estar nervioso, sabes que ella también lo está. Disfrutáis respirando y tan solo escuchandoos respirar, estáis nerviosos sin que vaya a pasar nada. La adrenalina os recorre para tensar vuestra sonrisa. Un suspiro, sí, un suspiro es buena señal. Suspiras, dices, dice, decís tonterias. El tiempo nunca llega. Llega para soñar. Soñáis vuestra vida, soñais un tango, un beso, una caricia, una noche, soñáis un despertar. Soñáis y os mirais a los ojos, respirais, nerviosos volvéis a suspirar.
Soñar, me gusta soñar...