El pelo rapado es cierto que no sienta bien a todo el mundo, pero no es menos cierto que también influye cómo hayas conocido a la persona. Es decir, tengo amigos que conocí rapados y luego he visto fotos de ellos con pelo y no me encajan. Sin embargo, he conocido a gente con pelo que de repente se rapa la cabeza y más que quedarle mal, lo que ocurre es que el impacto inicial repercute directamente en el intento de hacer una valoración imparcial.